El fuerte aguacero que cayó la tarde de ayer sobre la capital provocó estragos en algunas zonas. Avenidas como la Seis de Diciembre, Gaspar de Villarroel, Granados y en el barrio Jipijapa se registraron leves inundaciones, pero el problema fue mayor cuando los administradores de edificios residenciales reportaron que los  parqueaderos subterráneos  se llenaron de agua y requirieron  la intervención de los Bomberos y la Empresa de Agua Potable.

Algunos negocios de la avenida de Los Shyris también tuvieron dificultades, pues el agua  lluvia ingresó a sus establecimientos. Por ello, también fue necesaria la intervención del personal de la Administración Zonal Eugenio Espejo, quienes monitoreaban las llamadas de ayuda.

En el resto de la ciudad, el problema fue el tráfico debido a que varios semáforos quedaron inhabilitados tras la tormenta eléctrica que cayó sobre la ciudad. Aunque no se trató de emergencias graves, la demanda fue recurrente por lo que el personal no se daba abasto. Las llamadas llegaban, incluso, desde Tumbaco y El Quinche.

Y precisamente en la avenida Interoceánica se registró un derrumbe, a 100 metros del puente sobre el río Chiche, en el sentido Tumbaco - Puembo. Eso ocasionó que se formara una fila de vehículos de 2,5 kilómetros. Pasadas las 16:00 el material fue retirado y se restableció el tránsito.