La implementación de carriles exclusivos para ciclistas es uno de los tres ejes que componen el Plan de Movilidad que ejecutará el Municipio en la ciudad: la promoción e incentivo de la movilidad no motorizada.

Sumado al mejoramiento del transporte público y el uso racional del automóvil particular, este tercer eje   busca también reducir el impacto ambiental que genera el parque automotor. Como parte del proyecto en el último mes se han abierto ciclovías, por ejemplo, en las calles Ulloa, Mariana de Jesús y otras vías secundarias que ayudaban a aliviar el tráfico vehicular.

La decisión ha generado críticas entre algunos usuarios, sobre todo conductores, aduciendo que son muy pocos los ciclistas que transitan por ahí. En 40 minutos apenas dos personas usaron el carril exclusivo.

Amelia Hinojosa, moradora del lugar, afirmó que la congestión vehicular  en la calle Ulloa es frecuente por la masiva concurrencia de compradores al mercado de Santa Clara, al cual llegan diariamente camiones medianos, camionetas y compradores en su propio automóvil.

DATOS

Hasta el momento se han instalado 332 señales verticales, entre reglamentarias, preventivas e informativas; 1.200 metros de pacificadores de tráfico, y está prevista la colocación de separadores de tránsito de tres características en las siguientes cantidades: 12 mil separadores tipo delineador de carril, 13.400 tipo “tachas”, y 300 separadores tipo delineador abatible.

A lo largo de los 10 tramos señalizados se han colocado pacificadores de tráfico en las intersecciones y señales verticales.

BiciQ consta de 425 bicicletas, distribuidas en 25 estaciones, ubicadas estratégicamente.La ciclovía de la Pradera también es poco transitada, aunque la congestión es menor por ser una calle de un solo sentido. En la Naciones Unidas, en cambio, la ciclovía es compartida con los  peatones. Betsabé Arana, quien hace deporte en el lugar, cuenta que  en una misma semana  se escapó de chocar con los ciclistas en dos ocasiones.   

La Secretaría Metropolitana de Movilidad, dentro de su plan de acción, ha contemplado a Quito como una ciudad diversa que propicia la convivencia entre peatones, ciclistas y conductores.

Actualmente la ciclovía  tiene 60 kilómetros de longitud, que van desde la Plaza de Santo Domingo hasta la Y. En esa ruta  funciona, desde hace un año, el proyecto BiciQ compuesto por 25 estaciones de alquiler de bicicletas para facilitar el desplazamiento al trabajo y así ayudar a descongestionar el transporte público y reducir el uso de vehículos particulares.

Carlos Páez, secretario de Movilidad, explicó que el propósito del Cabildo es incentivar el uso de la bicicleta y afirma que en los últimos tres años al menos se ha triplicado el número de viajes en este transporte alternativo, aunque la entidad aún no maneja cifras al respecto.

Pese a ello, la organización Ciclópolis hace observaciones sobre el trazado del carril exclusivo para ciclistas y a eso atribuye los contratiempos que han enfrentado los conductores en los últimos días.

Mediante un comunicado de prensa, Diego Puente, vocero de la organización civil, reconoce la gestión del Municipio en cuanto a la promoción del ciclismo al incluir como una prioridad el diseño y la construcción de una importante red de ciclovías permanentes (exclusivas o compartidas).

Sin embargo, señala que ha generado malestar el diseño de algunas ciclovías, así como la manera y la demora en su implementación. “Es a estos últimos hechos a los que atribuimos la serie de conflictos y malentendidos que se ha generado últimamente en las calles donde se han empezado o terminado de implementar estas ciclovías”, reza el documento, en el que también se destaca que el Cabildo ya está haciendo correcciones.

Luis Collago es taxista desde hace 15 años y considera que  la ciclovía es ahora parte de la movilidad en Quito: “Es necesario que el Municipio verifique el uso de las rutas, pues unas son más utilizadas que otras. Ahora veo que las están señalizando mejor y eso beneficiará a los conductores y a los ciclistas”.

Al respecto, Páez  sostiene que cuestionar desde el argumento de que nadie utiliza  la ciclovía sería  como, por ejemplo, preguntarse qué sentido tienen los estacionamientos para las personas con discapacidad cuando se trata de  espacios que casi siempre lucen vacíos mientras los demás están llenos: “Todo eso tiene sentido cuando la gente goza de una atención preferente y, en segundo lugar, cuando le hace bien a la sociedad  incorporar dentro sus políticas y  de su repartición del espacio público a aquellos sectores que son minoritarios”.

Por ello, explicó que el trazado de la ciclovía se realiza en base a consideraciones técnicas y urbanísticas  que comprenden tres estrategias: 1) evaluar el tráfico que circula en las vías; 2) las calles que por sus condiciones  puedan compartir autos y bicicletas; 3) la ciclovía tiene que unir orígenes y destinos reales para  que tenga utilidad dentro del sistema de movilidad urbana cotidiana.

Para el arquitecto Luis Andino, la implementación de los tramos de la ciclovía no se está realizando de manera correcta: “Creo que se están suprimiendo plazas de parqueo y no se puede suprimir una cosa sin dar una alternativa. Es decir, cuando tengamos el Metro subterráneo y exista un transporte público al que la ciudadanía reconozca como tal y deje de usar su vehículo, podremos empezar a ocupar esos espacios, pero  mientras eso no se haga lo que hacemos es sembrar el caos”.

Anotó que con la implementación de las nuevas ciclovías se ha afectado la  circulación vehicular por rutas que servían para descongestionar las avenidas principales cuando se ha registrado una sobrecarga del parque automotor.

Actualmente el Municipio de Quito planifica la creación de nuevas rutas para la ciclovía en el sur de la ciudad, como también, la implementación de nuevas estaciones de la BiciQ. Páez indicó que la apertura de este nuevo tramo cuenta con el apoyo de la población y que las nuevas estaciones de la BiciQ fueron trazadas por colectivos de ciclistas como Enrokate, al Sur en Bici y Enbiciados del Sur. Las rutas se implementarán en los próximos meses, pues se encuentran en la fase de adjudicación.