Las golosinas y la comida chatarra son consumidas desde hace mucho por niños, jóvenes y adultos.

Con el transcurso del tiempo, este tipo de productos se ha modificado, mejorando su calidad y apariencia en aspectos como su color, olor y sabor.

Esto conllevó a que las empresas que las fabrican crezcan económicamente pues tienen un alto número de consumidores.

Los jóvenes de diferentes instituciones educativas del país consumen con mucha frecuencia la comida chatarra ya que los bares de los colegios venden este tipo de alimentos.

Pero en diferentes establecimientos se controla adecuadamente lo que se expende en los bares y exigen a sus administradores vender comida saludable, con el fin de estabilizar la cadena alimenticia.

Los estudiantes de los colegios Eugenio Espejo e Instituto Nacional Mejía comentaron sobre el tema y señalaron que la comida chatarra es la preferida por los jóvenes por su sabor.

Y aunque los alumnos mencionaron que tenían conocimiento sobre el daño que puede causar este tipo de alimentos a su salud y a su organismo, dijeron que prefieren consumir estos productos para variar un poco el tipo de comida que consumen diariamente en sus casas.

Los estudiantes creen que la comida chatarra puede mejorar sin que esta pierda su sabor y a la vez aportar a la salud de quienes la consumen.

Para ello, la comida chatarra debería tener menos grasas, compuestos químicos, colorantes y otras cosas de ese tipo.

Es necesario que los jóvenes se alimenten correctamente, no únicamente con productos como frituras, gaseosas, hamburguesas y dulces.

También es necesario que los chicos realicen deporte, tanto en sus casas como en su colegio.