Los estudiantes de la escuela Roberto Espinoza, de la parroquia Tumbaco (al oriente de Quito), permanecieron por alrededor de 2 horas fuera de sus aulas luego de que un sismo de 4,1 grados sacudió la urbe a las 08:02 de ayer.

El plantel fue la edificación capitalina más afectada por el movimiento telúrico, originado por la llamada Falla de Quito -que atraviesa la ciudad desde Tambillo hasta la Mitad del Mundo- a una profundidad de 8 kilómetros.   

Techos y paredes cuarteados se registraron en 4 aulas ubicadas en la parte antigua del plantel. Esa área tiene unos 100 años de construida e incluso está integrada al patrimonio de la parroquia quiteña.

El fenómeno natural sirvió a las autoridades y a los estudiantes para refrescar los planes de emergencia practicados desde el año anterior a propósito de la reactivación del volcán Cotopaxi.

Por ello, 960 niños evacuaron en orden sus aulas luego de la fuerte sacudida, cuyo epicentro se registró en el sector de la Plaza Argentina (en el centro-norte de Quito).
Preocupados, algunos padres de familia se ubicaron en las afueras de la escuela a la espera de noticias sobre sus hijos por parte de las autoridades.

Antes del mediodía los alumnos retornaron a sus aulas, con excepción de los 200 niños de 6º y 7º  año de educación básica que ocupan  los salones afectados.

Jaqueline Osorio, directora de la institución, señaló que hasta ese momento no se determinaba a qué sitio serían trasladados los niños, aunque se analizaba el uso temporal del salón de actos.

De acuerdo con informaciones oficiales, una escuela ubicada en el sector de San Juan de Tumbaco sufrió afectaciones menores, al igual que un plantel de la parroquia Pomasqui (al norte) y de la Magdalena (al sur de la urbe).

Los alumnos que asisten a estos planteles también fueron evacuados para evitar algún accidente.

Lorena Brito, presidenta de la Junta Parroquial, indicó que en esa área no había más afectaciones materiales aparte de las 2 instituciones educativas.  

Mientras que en el sector de Tanda (Cumbayá), el sismo generó pequeños deslizamientos de tierra frente al centro comercial El Rancho.  Pero, menos de 30 minutos después del movimiento telúrico, los escombros fueron retirados por personal del Cabildo.

Como una medida preventiva, servicios de emergencia realizaron evacuaciones en 8 edificaciones del hipercentro urbano capitalino. Pero a las pocas horas, los ocupantes de esas estructuras pudieron retornar a sus actividades normales.

Durante una rueda de prensa, el alcalde Mauricio Rodas señaló que las edificaciones patrimoniales religiosas no registraron afectaciones.

Alexandra Alvarado, jefa del área de sismología del IG, señaló que la existencia de la Falla de Quito provoca un levantamiento de toda la ciudad sobre los valles hacia el lado este. “Las colinas que bordean Quito son la respuesta de este movimiento”. Además, no descartó que se registren réplicas del sismo principal.

Recordó también que producto de esta falla se produjeron los sismos en agosto de 2014 en la zona de Calderón. En Sangolquí, Chimbacalle, Santa Rosa, La Ecuatoriana, Villaflora y Chillogallo el evento fue sentido de manera leve. (I)