El Cabildo realizó los estudios el año pasado
El proyecto Quitocables lleva 9 meses en espera
El proyecto de transporte en teleférico (Quitocables), que es la principal apuesta de la Alcaldía en materia de movilidad, sigue estancado. El 28 de enero de 2015, el alcalde Mauricio Rodas dijo en su programa radial de los miércoles que el trazado de las 4 líneas estaba definido.
Las rutas anunciadas fueron Argelia-Solanda-Mena 2, San Juan-Toctiuco-El Tejar, Pisulí-La Roldós-Ofelia y Carolina-Plaza Argentina-Cumbayá-Tumbaco. Transcurridos más de 3 meses de aquello, el burgomaestre efectuó (6 de mayo) un arranque simbólico de los trabajos en el sector La Argelia (en el suroriente).
Aquel día, el secretario metropolitano de Movilidad, Darío Tapia, aseguró que la definición de la empresa que se encargaría de la construcción del sistema de transporte tomaría unas cuantas semanas. El funcionario afirmó que ello era posible porque el Cabildo contaba con los estudios necesarios.
No obstante, la entidad que Tapia dirige publicó el 27 de mayo pasado en el portal del Sistema Nacional de Contratación Pública (Sercop) la convocatoria para un estudio sobre “la demanda del sistema de transporte por cable del Distrito Metropolitano de Quito (DMQ)”.
Eso a pesar de que el alcalde señaló, a principios de mayo, que cuando el esquema de movilidad esté completo, transportaría a unas 150.000 personas a diario. En el resto del año, la entidad municipal convocó a otros 2 concursos para la realización de estudios sobre los Quitocables.
El llamado a una consultoría para la elaboración de “los pliegos para la licitación de las líneas de transporte de cable del DMQ” fue publicado el 1 de junio de 2015.
Por problemas en las ofertas el proceso quedó insubsistente. Una nueva convocatoria se realizó el 20 de agosto y este concurso fue declarado desierto.
Finalmente, el 7 de octubre se hizo un nuevo llamado y el contrato se adjudicó a la empresa DCSA Ingenieur Conseil por $ 68.000.
El 15 de junio, la Secretaría de Movilidad llamó a licitación para contratar la elaboración del “plan de negocios mediante la colaboración público y privada del proyecto del sistema de transporte por cable de Quito”.
El contrato fue firmado 10 días después (25 de junio) entre el gobierno local y el consultor Gustavo Montalvo Dassum por $ 37.000. La Alcaldía aceptó un contrato complementario por $ 10.000, que se firmó el 14 de julio de 2015. Los resultados del estudio de demanda, realizado por la Universidad Católica de Quito por $ 70.000 y fue entregado en diciembre, determinó que la llamada Línea Azul (Pisulí-La Roldós-Ofelia) no es autosustentable mediante el cobro de pasaje.
Así lo anunció el alcalde Rodas el 10 de febrero, quien añadió que el costo de la construcción de esta ruta lo asumirá el Cabildo.
En el plan anual de contrataciones (PAC) de la empresa municipal de obras públicas se prevé invertir este año $ 29,8 millones en la construcción de la Línea Azul y $ 1,9 millones en su fiscalización. La obra no ha sido licitada todavía, aunque la Alcaldía prevé inaugurarla este año.
Para hacer sustentable la Línea Roja (Argelia-Solanda-Mena 2), se prevé conectarla con el cantón Rumiñahui, lo que estaba previsto inicialmente para una segunda fase.
Para esta y las otras 2 rutas (amarilla y naranja), el gobierno local prevé captar el interés de empresas o consorcios mediante alianzas público-privadas. (I)
DATOS
Las cabinas previstas por la Alcaldía pueden llevar 10 pasajeros sentados. Las líneas norte, sur y centro transportarían 3.600 personas/hora/sentido.
Estas cabinas, de acuerdo con la planificación del gobierno local, se movilizarían a una velocidad promedio de 10 metros por segundo (m/s) y saldrían de las estaciones cada 10 segundos.
Para la conexión con los valles, el Cabildo prevé usar un sistema 3s, con una velocidad media de 7,5 m/s, cabinas de 35 pasajeros sentados, capaz de movilizar hasta 6.000 personas por hora y sentido.
Los grupos sociales que crearon, hace 4 años aproximadamente, este sistema de conexión entre Quito y el Valle de Tumbaco planifican que esta ruta transporte unas 70.000 personas a diario.
El sistema, bautizado como Metroférico por sus planificadores, tendría un crecimiento anual de demanda de alrededor del 5%, con lo que transportaría unas 150.000 personas diarias dentro de 20 años.
El Metroférico requeriría para su operación unas 110 cabinas con capacidad para transportar cómodamente de 30 a 40 ciudadanos. La tarifa prevista en esta línea sería de $ 0,75.
Sumadas las cuatro líneas, el sistema Quitocables tendrá más de 28 kilómetros de recorrido, contará con una veintena de estaciones y transportarán 150.000 pasajeros por día.