Tras una reunión de cuatro horas, los prefectos de Pichincha (Gustavo Baroja) y Santo Domingo de los Tsáchilas (Geovanny Benítez) ratificaron los acuerdos logrados el 25 de abril sobre la administración de la vía Alóag-Santo Domingo.

Esto significa, en primer lugar, que los gobiernos seccionales manejarán por separado las estaciones ubicadas en el sector de Alóag (Pichincha) y el kilómetro 88 de la carretera (Santo Domingo).

Así mismo, que el cruce de un vehículo liviano por los 101 kilómetros que tiene la conexión terrestre  significará el pago de $ 2 en total, divididos en un $ 1 en la provincia serrana y $ 1 en la costeña.

Esta medida, sin embargo, se implementará a partir del próximo martes luego de que se concrete la modificación del fideicomiso que administra, hasta ahora, los recursos que genera la vía.

Entre las modificaciones están la salida de la provincia ‘tsáchila’ del  instrumento financiero y la reducción de la tarifa duplicada (por Pichincha y Santo Domingo) que se viene cobrando en el peaje de Alóag.

Hasta tanto, desde las 00:00 de hoy se reiniciaron los pagos suspendidos el último martes en las estaciones y la tarifa será de $ 2 (en Alóag) y $ 1 (en el kilómetro 88).

Del mismo modo, se ratificó que el peaje construido por Pichincha en la zona de Tandapi no entrará a operar y esas instalaciones se destinarán a otros fines.

Mientras tanto, el prefecto Benítez anunció que parte de lo que su jurisdicción recaude en la vía se destinará a cubrir la deuda pendiente del contrato firmado en 2007 con la empresa Hidalgo & Hidalgo para la ampliación y mantenimiento de la carretera.

El funcionario señaló que, en un inicio, se destinarán $ 0,45 de cada $ 1 que se cobre para ayudar al pago de los aproximadamente $ 18 millones que estarían pendientes de cubrir del convenio.

Benítez estimó que conforme se realicen pagos a la constructora y la corrida financiera varíe, la proporción que destine Santo Domingo a este fin se iría reduciendo.

El Prefecto espera que, en un tiempo relativamente corto, el nivel llegue al 28% ($ 0,28 por cada $ 1 recaudado), propuesta que su administración planteó desde un inicio.

El desacuerdo del monto de la deuda que asumirá el territorio ‘tsáchila’ era el escollo que restaba por solucionarse. (I)