La organización negocia con la municipalidad
El Cabildo de Quito notificó desalojo al colectivo Diabluma
La organización política Diabluma recibió del Municipio de Quito, el pasado lunes, una notificación del inicio de un proceso de desalojo de La Casa Pukará, ubicada en las calles Tarqui y Riofrío (centro-norte de la ciudad).
El inmueble está en posesión del colectivo desde hace 7 años, luego de lo cual los integrantes de la agrupación conocieron que el lugar le pertenecía al Cabildo.
Felipe Ogaz, vocero del grupo, ratificó que les llegó a su dependencia el documento.
No obstante, horas después, delegados del Ayuntamiento expresaron al representante de Diabluma “su voluntad de conversar y llegar a un acuerdo en este sentido”.
“El lugar estaba deshabitado y el colectivo, al ser parte del movimiento Ocupa Global, decidió instalarse en el sitio (...) Es un absurdo que se tengan abandonados los espacios (...). Nosotros no queremos que se reconozca la propiedad, queremos otras formas de reconocimiento, como respeto a nuestro trabajo en inclusión” dijo Ogaz.
De momento, el vocero adelantó que la agrupación política mantendría conversaciones directas con las secretarias metropolitanas de Inclusión y Cultura del Municipio, Margarita Carranco y Mariana Andrade. Esto luego de que en días pasados, ambas funcionarias inspeccionaron el lugar para constatar el trabajo político y cultural.
La casa Pukará es un centro autogestionado en donde funciona un espacio de artes marciales, taller de bicicletas, mecánica, un centro de desarrollo de tecnología, además de una radio on line. También se efectúan encuentros con otros movimientos sociales.
El colectivo prefirió no dar más detalles sobre el tema, pero confía en un resultado positivo de los diálogos.
Según Ogaz, la organización no tendría otro lugar o espacio para ocuparlo. “La única posibilidad que tenemos nosotros es seguir ‘ocupando’, pues somos parte del movimiento Global Ocupa y nuestro lema es ni gente sin casas, ni casas sin gente”, dijo.