El alcalde de quito aceptó la renuncia de Edmundo barros, quien asumió la coordinación zonal hace más de un año
El administrador de Calderón, reemplazado
La parroquia de Calderón, que en los últimos años ha registrado un crecimiento demográfico, tiene, desde la semana pasada, un nuevo administrador zonal.
Héctor Muñoz fue designado por el Municipio de Quito para cumplir con estas funciones, en lugar de Edmundo Barros, quien desde hace más de un año se desempeña como administrador zonal de Calderón.
El Municipio, al parecer, tenía razones suficientes para aceptar la renuncia de Barros y designar a un nuevo administrador.
Según un comunicado publicado en la página web del Municipio, “se aceptó la renuncia de Barros con el objetivo de acelerar las diferentes obras que se desarrollan en este importante sector de Quito”.
Diferentes dirigentes barriales de la parroquia de Calderón desaprueban la gestión de Barros.
Isabel Bejarano, presidenta del Gobierno de la parroquia de Calderón, dice que su administración fue muy cuestionada, porque, aunque ha transcurrido casi un año y medio desde que fue designado, las obras en esta parroquia se han paralizado.
“El presupuesto, que estaba contemplado para el desarrollo de obras en la parroquia para el año 2014, incluso se perdió y fue devuelto”. Según Bejarano, Edmundo Barros era una persona muy afín al concejal por la alianza Suma-Vive, Sergio Garnica.
Al momento, esta parroquia, integrada por 380 barrios, tiene muchas necesidades. La prioridad es dotar de alcantarillado y adoquinado. Bejarano dice que a diferencia de la administración anterior, con Barrera hubo trabajo en la parroquia. Entre las obras más destacables estuvo la construcción de las vías principales, como la Geovanny Calles. Hubo construcción del Hospital Docente, colegios del milenium y la réplica Montúfar. “Todo está detenido. Nunca se concretó nada, pese a las palabras. Totalmente inoperante”.
Claudio Gonzales, presidente del barrio San José Alto, subraya que con la gestión de Augusto Barrera se concretó el adoquinado de más de 5 kilómetros de vía, al igual que la construcción de bordillos, entre otras obras.
Edmundo Barros, sostiene González, nunca demostró su interés por las problemáticas barriales. Asegura que ni siquiera visitaba los barrios. “Con el exadministrador zonal de Calderón que estuvo bajo la gestión de Augusto Barrera, todo era diferente. Él sí se preocupaba y nos visitaba”.
En Calderón hay muchos barrios que no disponen del servicio de alcantarillado, una necesidad básica para quienes habitan en esta zona. “No hay atención y hay mucha negligencia por parte de las autoridades”. Gerardo Chasiluiza, habitante de Calderón, cuenta que durante mucho tiempo solicitaron a Edmundo Barros la posibilidad de construir un muro cerca a unas viviendas en riesgo, al estar situadas cerca del abismo, pero nunca se acercó a verificar el peligro que corrían. “Nunca tuvimos ningún contacto con este señor”.
El nuevo administrador, Héctor Muñoz, deberá agilitar los proyectos y optimizar los servicios a la ciudadanía, como lo advierte el comunicado municipal. (I)