A las puertas de la posesión de un nuevo gobierno, los diferentes sectores sociales ven con expectativas las nuevas figuras que comandarán el Estado. Entre ellos se encuentran los medios de comunicación que, en el caso de los privados, han sido críticos contra el actual gobierno. Por esto miembros de organismos que defienden este ejercicio hablaron sobre sus requerimientos.

Para César Ricaurte, de Fundamedios, las expectativas de periodistas y medios de comunicación se resumen a “que el Ecuador cumpla las recomendaciones de los organismos internacionales de DD.HH., Comité de la ONU, CIDH, Relatoría y otros organismos”, y que el Estado se encargue de “revertir la situación de severas restricciones que se han dado en los últimos años”.

Además expuso 12 puntos fundamentales que el Estado debería tomar en cuenta: reconceptualizar la Secretaría de Comunicación; reformar el reglamento a la Ley Orgánica de Comunicación; anular en su totalidad el actual concurso de frecuencias; ratificar el deber de que el Ejecutivo garantice la plena vigencia de los derechos y libertades fundamentales como la libertad de expresión.

Además, pide cesar la supuesta persecución contra periodistas; adoptar el Plan de Acción de la ONU sobre la seguridad de los periodistas; limitar el uso de las cadenas nacionales; despolitizar y despartidizar los organismos de control y regulación de la comunicación; regular la pauta oficial del gobierno para cumplir con la equidad, transparencia y pluralismo; realizar una auditoría de los medios incautados; adoptar medidas que garanticen la independencia de los medios públicos; y prohibir toda acción estatal de espionaje.

Para Guadalupe Fierro, presidenta de la Unión Nacional de Periodistas, existen puntos “innegociables” para recuperar la libertad de expresión, entre ellos destacó la eliminación del derecho a la comunicación como un servicio público; la revisión del sistema procesal para el juzgamiento y sanciones a periodistas y medios; la expulsión y depuración de figuras jurídicas controversiales y ambiguas; y, la eliminación de la Supercom.

Marco Villarruel, expresidente del Colegio de Periodistas, afirmó que con respecto a la necesidad actual de los periodistas y los medios se debe debatir y reformar la actual Ley de Comunicación. “Quien entienda a los medios debe saber que estos en esencia no van a cambiar”. Eso lo dijo con el afán de recalcar la misión de los medios de comunicación, que “no es la de halagar”.

Pero afirmó que los medios están abiertos a esperar un diálogo con el próximo gobierno.

Romel Jurado, experto en comunicación, afirmó que si bien los medios de comunicación han mantenido una pugna frente a la Ley de Comunicación, estos deben reconocer que la misma garantiza el buen trabajo periodístico, así como la defensa de los derechos de los ciudadanos. “Derogar la Ley de Comunicación es tomar una posición política y no entender que también su espacio de trabajo está garantizado”, afirmó.

Por su parte, dijo que los medios de comunicación públicos también tienen necesidades. El nuevo gobierno, entonces, deberá centrarse en permitirles consolidar la autonomía editorial y económica a los medios públicos. Parte de esto, resaltó el experto, es establecer reglas legales para asignar una pauta publicitaria pública. (I)