A través de un veto parcial al proyecto de reformas al Código de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización (Cootad), el presidente Rafael Correa propone extinguir los patronatos pertenecientes a los gobiernos autónomos descentralizados municipales, metropolitanos y provinciales en el plazo de un año.   

Además dispone que el patrimonio de esas entidades sea transferido de manera gratuita al municipio o prefectura correspondiente, al igual que su personal.

Pero de haber una reestructura organizacional que conlleve a la liquidación de partidas, se procederá con el pago de indemnizaciones de acuerdo a la ley.

El veto, remitido el lunes pasado a la presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira, también establece que los gobiernos autónomos deberán destinar el presupuesto que les correspondía a las dependencias de servicio social y asumirán las funciones que puedan legalmente.     

El documento de tres páginas explica que “la existencia de patronatos provinciales, metropolitanos y municipales se opone a los principios de  gestión eficiente, eficaz y coordinada que los gobiernos autónomos deben propender”, y califica como anacrónico, discriminatorio y antidemocrático que sean solo mujeres -específicamente las esposas de los alcaldes, concejales o prefectos- quienes administren los centros. El texto se remitió ayer a la Comisión de Gobiernos Autónomos, la cual se allanaría a la objeción.