En una carta dirigida a EL TELÉGRAFO, el concejal de Quito, Antonio Ricaurte, expresó su "preocupación" por la reunión en Guaranda (Bolívar) en la que participaron varios alcaldes y prefectos del país, y en la que participó el burgomaestre Mauricio Rodas.

En la misiva, Ricaurte manifiesta que la alianza Suma-Vive se construyó desde la centro-izquierda y "nunca se estructuró como un espacio de oposición al Gobierno, sino de construcción".

Además, indica que "la actual administración municipal debe seguir los lineamientos que hicieron posible que lleguemos a la Alcaldía y concejalías, esto es que esta administración no se oponga al Gobierno y que por el contrario coordine acciones y trabaje de manera conjunta por el bien de nuestra ciudad".

"No estoy de acuerdo con que se haya producido esa reunión sin que el señor Alcalde (Rodas) nos haya informado de la misma a quienes formamos parte de esta alianza", recalca Ricaurte en la carta.

También subraya que "jamás" estará de acuerdo ni permitirá como militante de izquierda y defensor de los intereses de Quito, "que se produzca una reunión con fines de oposición al Gobierno desde un espacio de derecha".

"Quiero creer que esa reunión fue para tratar temas de la ciudad y no para oponerse al Gobierno desde un espacio de derecha", finaliza la misiva.

La reunión de los alcaldes y prefectos se llevó a cabo el pasado 10 de septiembre. La Asociación de Municipalidades del Ecuador (AME) también expresó su descontento.