En ambato fue develado un busto en honor al soldado Darwin Panchi
Panchi fue nombrado cabo segundo
Una ofrenda floral, una pancarta con fotografías y una placa develada fueron los homenajes a las víctimas del 30S:Froilán Jiménez, Darwin Panchi y Juan Pablo Bolaños. Ellos, junto al policía Edwin Calderón y el soldado Jacinto Cortez, fallecieron durante la rebelión policial del 30 de septiembre de 2010.
las 10:00 de ayer miembros del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) colocaron un ramillete de flores para recordar a Froilán Jiménez. El ramo fue puesto en el parterre de la avenida Mariana de Jesús de Quito, donde cayó el uniformado mientras protegía el vehículo del presidente Rafael Correa. La muerte del policía fue transmitida en vivo por los canales de televisión que informaban sobre el rescate al Primer Mandatario, quien se encontraba en el Hospital de la Policía.
En el sitio también estuvo Ramiro Panchi, padre del soldado Darwin Panchi. Él llegó con una fotografía ampliada de su hijo. Visiblemente conmovido, recordó que la última vez que escuchó a Darwin, fue alrededor de las 18:00, cuando lo llamó por teléfono y le dijo: “Papi, me voy a rescatar al Presidente”.
Al día siguiente, su esposa le comunicó la tragedia: su hijo murió por un impacto de bala en la cabeza. Su voz se quebranta al recordarlo. Aunque ya pasaron 4 años, cuenta que todo es muy doloroso, tanto para las familias de las víctimas como para los parientes de los uniformados sentenciados.
“A los policías que han recibido sentencias, solo les dijera: ¿por qué tenían que acabar con una vida?, ¿Por qué se prestaron para eso?. Ustedes estaban para defender el orden público, no tenía por qué terminar de esa manera”, reclamó.
Minutos más tarde, y a pocos metros del mismo parterre, se develó una placa en honor al estudiante universitario Juan Pablo Bolaños, un joven que había acudido al hospital para exigir la liberación de Correa y que pereció en la protesta. El joven falleció al recibir dos disparos: uno en la cabeza y otro en la pierna.
La Secretaría de Gestión de la Política (SGP) ayudó en la organización del homenaje. Rosa Mireya Cárdenas, subsecretaria de Ciudadanía de la entidad, reiteró que el muchacho fue una víctima que luchó por sus ideales. “Aquí murió Juan Pablo, defendiendo la democracia porque quería un país de mejores días”, destacó.
Olga Fernández, madre del chico, recordó que su hijo llegó hasta el lugar porque apoyaba el Gobierno. Estaba comprometido con una educación universitaria libre.
“Él venía a defender sus ideales, porque en este Gobierno se dio paso a la educación gratuita y quería defender ese derecho y graduarse en ingeniería”, comentó.
Al finalizar el encuentro, Fernández reflexionó sobre la posibilidad de un indulto para los gendarmes. “Les diría a los policías que primero pidan perdón a Dios, porque a él lo han ofendido, luego al señor Presidente, porque la consigna era matarlo, y luego al pueblo, porque ultrajaron y nos faltaron al respeto”, sentenció la señora.
El trabajador Humberto Gavilánez, quien asistió al homenaje, relató que la noche del 30S, al percatarse de los hechos, se arrodilló junto a su familia en oración y pidió a Dios que el Presidente salga con vida. A las 16:00 de este martes estaba previsto un acto cultural en la Plaza San Francisco de Quito en favor de la democracia, con la presencia del presidente Rafael Correa.
Datos
30 de septiembre de 2010. La Policía se insubordina en el país, lo que dio paso a la violencia delictiva, saqueos e incluso a atentar contra la vida del Presidente.
Caídos en acción. Ese día militares y civiles a favor del gobierno de Rafael Correa salieron a las calles a defenderlo y rescatarlo. 5 personas fallecieron.
Sentencias a insurgentes. Hasta la fecha los tribunales del país han condenado a 93 personas, implicadas en 21 causas. 6 de ellas son los policías que atentaron contra la vida del Primer Mandatario.
Procesos activos. En 4 años todavía hay 53 procesos activos, 34 en indagación previa, además se reabrieron 8 causas que estaban desestimadas y la Fiscalía inició una indagación contra quienes perdieron evidencias en el sector del Hospital de la Policía.