El prefecto de Manabí, Mariano Zambrano, dijo que la notificación de destitución por parte de la Contraloría General del Estado carece de derecho y aseguró que continuará ejerciendo su cargo.

 "Las funciones de prefecto están intactas, porque esa resolución no está en firme y seguiré actuando normalmente en esta función que me fue otorgada por el pueblo manabita”, expresó en rueda de prensa. 

Zambrano señaló que el contralor general subrogante, Pablo Celi, "no tiene competencia para destituir a ningún funcionario público de elección popular". Cuestionó que la notificación se hiciera pública primero en las redes sociales.

En ese sentido, el prefecto informó que "en goce de sus derechos constitucionales y como autoridad", apelará al debido proceso, aunque criticó que no se han respetado plazos. 

"Como ecuatoriano solicito a las autoridades que se reserven sus actuaciones en el marco  de la seguridad jurídica y derecho", resaltó. (I)