El primer informe presentado ayer por la Comisión Investigadora del 30-S cita a militantes de Sociedad Patriótica (PSP), Movimiento Popular Democrático (MPD) y Pachakutik como parte de los actores intelectuales y materiales de la sublevación policial desarrollada el 30 de septiembre de 2010 (30-S), que supuestamente estaba motivada por la aprobación de una ley que regulaba a los servidores públicos e incorporaba a policías y militares.

La Comisión, integrada por los ciudadanos Carlos Vaca, Diego Guzmán y Óscar Bonilla estableció seis factores que intervinieron en el hecho: actores políticos y sociales, debilidad institucional, actores económicos, sistemas-medios de comunicación, crimen organizado y servicios de inteligencia.

Un factor fundamental, según la Comisión, fue la manipulación por parte de los altos mandos militares y de la Policía frente a la aprobación de la Ley de Servicio Público previo al 30-S y la desarticulación del GAO, unidad élite de la Policía creada en 1994. (Ir a galería de imágenes)

A ello se sumó la ausencia  de un comité de crisis que  asuma una respuesta institucional frente a las dudas e inconformidad de los uniformados que adquirieron una gran magnitud y gravedad. Además se cuestionó que los altos mandos no hayan suspendido las radio patrullas, fundamentales para la organización de la protesta. Y recordaron que una microonda de Teleamazonas se instaló antes de las 08:00 fuera del Regimiento Quito.      

Servicios de Inteligencia

La comisión estableció que la Secretaría Nacional de Inteligencia, hasta el 30 de septiembre pasaba por un proceso de institucionalización que todavía dependía de los subsistemas de inteligencia policial y militar, y sus alertas ante una posible rebelión policial no estaban incluidas en la agenda del Comité Nacional de Inteligencia. Además, se advirtió que “no había superado totalmente la dependencia de agencias de inteligencia extranjeras”.

Y cuestionaron que el ex Fiscal General, Washington Pesántez, el 1 de octubre de 2010 haya entregado la  investigación a la Dirección General de Inteligencia de la Policía Nacional, entidad responsable de los hechos del 30-S.

Para ello se conformó un grupo de nueve policías que trabajaban con una Secretaría y que estaban a cargo de los fiscales asignados para la recopilación de evidencias. “Era una investigación meramente instrumental”, dijo Baca, al señalar que Pesántez entregó a “los partícipes principales del intento de golpe de Estado la tarea de investigar a sus propios compañeros”. Hasta este momento cerca de 90 policías han participado en la investigación.    

Actores políticos y sociales

El dirigente indígena Pepe Acacho; el integrante de la Junta Cívica de Guayaquil, Miguel Palacios; el líder de Sociedad Patriótica y militantes del MPD y Pachakutik también fueron señalados por el presidente de la Comisión 30-S, Carlos Baca, como algunos de los actores materiales e intelectuales del 30-S.   

Y recordó que el día previo, el asambleísta de PSP, Francisco Cisneros, intervino en el debate de la Ley de Servicios Público y llamó a policías y militares  a sublevarse. También  se sintió la presencia de miembros del partido MPD en la toma de la Asamblea Nacional y en otras provincias del país. El legislador Cléver Jiménez pidió la renuncia del presidente Correa, y el ex asambleísta Enrique Herrería la amnistía a favor de los  sublevados.

DATOS

A las 07:30 en el Regimiento Quito Nº 1, los policías que habitualmente se concentraban en el recinto  de la Mariana de Jesús para recibir disposiciones ya estaban amotinados.

A las 09:00 la Asamblea Nacional fue tomada por la Escolta Legislativa, que impidió el ingreso de los asambleístas, mientras que  los militares se adhirieron a la protesta, lo que produjo la suspensión de las operaciones del aeropuerto Mariscal Sucre hasta alrededor de las 19:00.

Desde las 10:40 hasta  las 20:30, Rafael Correa estuvo en el Hospital de la Policía en contra de su voluntad.

A las 21:36, el presidente se dirige a sus simpatizantes en la Plaza Grande.