Cumbre de Celac arranca con llamado a la distribución de la riqueza
La IV cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) arrancó este miércoles enfocada en la erradicación de la pobreza extrema en la región y a la espera de un pronunciamiento sobre la supervisión del fin del conflicto armado en Colombia.
Los presidentes y representantes de los 33 países que conforman el bloque americano fueron recibidos por el presidente de Ecuador, Rafael Correa, y el canciller Ricardo Patiño en la sede de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en las afueras de Quito.
Está previsto que los mandatarios se reúnan a puerta cerrada luego de la foto oficial, frente al monumento a la Mitad del Mundo, y que por la tarde hagan sus intervenciones de 6 minutos, tras lo cual habrá una declaración oficial y Ecuador entregará la presidencia pro tempore del bloque a República Dominicana.
Correa destaca en Cumbre de la CELAC que "el mundo del futuro será un mundo de bloques"
En su discurso de inauguración de la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), el presidente, Rafael Correa, enumeró no solo los ejes en que han venido trabajando y deberían seguir haciéndolo en bloque los países miembros para alcanzar objetivos de desarrollo, igualdad y paz, sino que antes de ello explicó "la ira" que reflejan las manos plasmadas en los cuadros del extinto pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín.
El Mandatario anfitrión de la cita internacional, empezó su discurso pasándole revista a los ejes propuestos en la anterior cumbre de la CELAC cuando Ecuador asumió la Presidencia Pro Témpore, en la que el objetivo ha sido trabajar hacia la reducción de la pobreza en la región y en declararla zona de paz, para lo cual incluso han apoyado el proceso de paz que se viene desarrollando en Colombia entre el Gobierno y la guerrilla de las FARC.
Destacó que, por ejemplo, el ingreso tributario debe financiar en los países miembros las oportunidades en cada país. Entonces indicó que en Ecuador hay salario básico pero que se camina al salario digno que cubra la canasta básica de las familias. En este punto, también manifestó que se necesitan políticas laborales en la región para no sacrificar a nuestros trabajadores. Sin embargo, para lograr todo aquello dijo que se requiere mejor distribución de lo público.
Los ejes a trabajar en bloque
El Jefe de Estado ecuatoriano, al referirse a los ejes en los que se deben acentuar es, en primer lugar, la globalización de la solidaridad y de la riqueza.
El segundo reto del bloque es fortalecer la educación, tecnología y el conocimiento, para acortar la brecha del conocimiento. En este tema indicó que como bloque se debe impulsar el conocimiento, ya que mientras más personas la utilicen será mejor para todos, pero que para ello se debe buscar una nueva forma de gestionar el conocimiento.
En tercer lugar destacó que es imperioso generar consensos para la lucha contra el cambio climático, con un nuevo pacto social que defienda los derechos de la naturaleza y sanciones el daño ambiental y reconozca la afectación causada por los grandes intereses.
Como cuarto punto, dijo que es importante trabajar en bloque para gestionar el desarrollo a través de la inversión pública, para superar la trampa del subdesarrollo. Destacó la nueva arquitectura financiera que se está construyendo en la Unasur, para ya no caer, por ejemplo, en la trampa de los préstamos caros por parte de organismo multilaterales de crédito.
Resaltó, por ejemplo, la inversión que Ecuador viene haciendo en hidroeléctricas, que significarán ahorro para el Estado con energías limpias, aunque ciertos sectores de la oposición busquen satanizar esa inversión asegurando que se trata de gasto.
Señalo que los países necesitan tener una adecuada inversión extranjera, justa y equilibrada, que beneficie mutuamente y sobre todo respete a la naturaleza. De allí que resaltó que es también se deberían crear centros de arbitraje que no defiendan el capital y en donde los árbitros no estén vinculados a las multinacionales.
"El mundo del futuro será un mundo de bloques", destacó y entonces remarcó que CELAC debe terminar reemplazando a la Organización de Estados Americanos (OEA), que no representó jamás intereses de los países de América.
"¿Por qué tenemos que discutir nuestros problemas en Washington?, preguntó, de allí que se necesita un nuevo sistema interamericano y que CELAC debe ser el foro para la discusión de asuntos latinoamericanos y del Caribe.
A decir de Correa, también necesitamos un nuevo sistema de derechos humanos, y que la sede no esté en un país que no ha ratificado ningún acuerdo y que, incluso, pese a ello, lo financien, "pagando para controlar al resto, lo cual se llama neocolonialismo".
"Todos está listo para el nuevo sistema interamericano", apuntó.
Antes de concluir su discurso de 20 minutos, el presidente ecuatoriano indicó que el desarrollo es especialmente un tema político que depende de quién manda, que debe dar paso al poder popular. "Hoy enfrentamos tiempos difíciles y la región tiene problemas para crecer, pero hay grandes posibilidades acumuladas y en nuestros recursos", concluyó.
Encuentro de cancilleres
El martes, en la inauguración del encuentro de cancilleres previo a la cumbre, Patiño recordó que este miércoles se fijará la llamada Agenda 2020, cuyo punto central es la erradicación de la pobreza extrema, en una región golpeada por la desaceleración económica y la caída de los precios de las materias primas.
"No es que vamos a proponernos metas para ver quién cumple y quién no cumple, y le ponemos una sanción al que no la cumple, no", dijo el canciller ecuatoriano este miércoles a la televisión oficial.
La Celac va a "establecer un compromiso de hermanos para que todos podamos avanzar y, especialmente, los países menos desarrollados, los países más pequeños (...), para que los que tienen más adelanto, en distintas materias, los acompañen", agregó.
En Latinoamérica y el Caribe habitan unos 620 millones de personas (8,5% de la población mundial). Según estimó en 2014 la Comisión Económica para América Latina (Cepal), en la región unos 165 millones de personas viven en situación de pobreza, de los cuales 69 millones están en extrema pobreza.
Aunque no está en la agenda oficial de la cumbre, el canciller ecuatoriano ha mencionado que a pedido de Colombia en la cumbre se tratará la creación de una misión de la ONU y representantes de la Celac, que verificará la inminente dejación de armas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el cese al fuego bilateral, para poner fin a un conflicto armado de más de medio siglo. (I)
Fotos: Miguel Jiménez y Fernando Sandoval/El Telégrafo