El presidente de la República, Lenín Moreno, regresó al país el domingo en la noche, procedente de Nueva York, donde estuvo la semana pasada. Allí participó en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Ayer retomó sus actividades en el despacho de Carondelet. Esta semana será especialmente intensa para él, porque tendrá que definir los temas de la consulta popular y del plan económico. Todo ello en base a las propuestas que vengan de diversos sectores que fueron convocados al diálogo.

Su primera actividad pública fue el tradicional cambio de guardia de los Granaderos de Tarqui. En un inicio la agenda oficial solo incluía esa ceremonia y un encuentro con la Asociación de Municipios del Ecuador (AME), pero lo último no se realizó. Pero a media mañana se incluyeron dos reuniones; una con el contralor subrogante, Pablo Celi, y otra con el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Juan Pablo Pozo. A esto se sumaron reuniones con delegados de las prefecturas y de las juntas parroquiales. En la tarde recibió a una delegación del sector de la construcción.

En el caso de los gobiernos parroquiales, Bolívar Armijos, dirigente de la Conagopare, sostuvo al finalizar la cita que insistieron en la necesidad de una reforma legal que permita la elección de los prefectos solo en las jurisdicciones rurales.

También le presentaron las necesidades del sector, entre ellas, las de los servicios básicos. “El Presidente se ha comprometido a ejecutar un proyecto de agua  potable y alcantarillado con los gobiernos parroquiales y la gestión para reformar el Código de la Democracia”, dijo.

En el caso del contralor, Celi acudió al Palacio de Carondelet para entregarle al Primer Mandatario el proyecto de ley que crea el Tribunal de Cuentas del Estado, mediante el cual deroga la Ley Orgánica de la Contraloría General del Estado (CGE), porque esta entidad sería reemplazada por el organismo colegiado antes citado.

El tribunal, según el planteamiento de Celi, estaría constituido por siete miembros: dos por la Asamblea Nacional, uno por el Presidente de la República, dos designados por concurso público de méritos y oposición y el resto serán miembros que provengan de la Contraloría General del Estado, tras concurso interno.

“El objetivo de este proyecto es la configuración del organismo de control de naturaleza técnica, donde la instancia de autoridad y decisión sobre la aprobación de informes y la decisión de autoridades sea una instancia colectiva que permita superar la actual figura de una autoridad unipersonal”, explicó Celi al salir de la entrevista con Moreno, que duró dos horas y a la que no tuvo acceso la prensa.

De la conformación de este cuerpo dos de ellos serían designados por la Asamblea Nacional, uno por el Presidente de la República, dos llegarían por concurso de méritos y oposición, y dos provendrían de los funcionarios de carrera de la Contraloría General del Estado, escogidos por concurso interno.

“Tribunales como este, bajo diversas denominaciones, funcionan en varios países de la región, como Brasil, Argentina y Uruguay”, detalló la autoridad de control.

El contralor Celi llegó muy temprano a la Presidencia de la República. Estuvo junto a Moreno en el balcón de Carondelet en el cambio de guardia. En la tarde tenía previsto reunirse con el titular del Consejo Nacional Electoral (CNE), Juan Pablo Pozo. (I)

DATOS

Sobre el proyecto que impulsa el Contralor, el Tribunal de Cuenta estaría dirigido por un cuerpo colegiado, conformado de entre 5 y 7 miembros.

Además del Contralor subrogante, en el cambio de guardia estuvieron María Ramos, ganadora del Mundial de Hornado; Doris Yánez, directora de la Fundación Héroes de Vida.

Además asistieron Patricio Silva, presidente del Club Héroes de Vida; Ruth Vélez, reina de la Fundación Héroes de Vida; Nelson Chávez, de la Cámara de Comercio; Roberth Vélez, de la Cámara de Transporte de Manabí; Edith González, de la Escuela de Conductores Profesionales, entre otros invitados.

En la reunión con el titular del CNE el Jefe de Estado tenía previsto dialogar sobre la eventual consulta popular.