El vicepresidente de la República, Jorge Glas, lideró esta mañana la ceremonia por los 194 años de la Batalla del Pichincha y del Día de las Fuerzas Armadas. El evento solemne se llevó a cabo en la Cima de la Libertad, en donde se desarrolló la gesta libertaria. 

Junto al Segundo Mandatario estuvieron los ministros de Defensa, Ricardo Patiño, y de Coordinación de Seguridad, César Navas. También participaron los miembros del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.

El vicepresidente Glas -quien comandó el cambio de guardia en el Templo de la Patria- agradeció en su discurso a los miembros de las Fuerzas Armadas por su trabajo y sacrificio en los trabajos de reconstrucción de las zonas afectadas por el terremoto de 7,8 grados que soportó el país el pasado 16 de abril. 

"Hoy, como ayer, nos levantaremos frente a la adversidad y volveremos a reconstruir el Ecuador (...) volveremos a vencer esta nueva batalla, con la participación de todos y todas, no solo para reconstruir Manabí y Esmeraldas", indicó el dignatario. 

El Segundo Mandatario advirtió que "hoy, hay quienes intentan restaurar el pasado, para proteger sus privilegios", pero resaltó que "el gobierno de la Revolución Ciudadana asume la Defensa como un bien público, que nos involucra a todos, civiles y militares". 

"Que viva el 24 de Mayo, que viva un Ecuador Unido y Solidario", expresó Glas al finalizar su discurso. 

Minutos antes, el vicealmirante Oswaldo Zambrano,  jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, también agradeció el trabajo de las FF.AA. durante la emergencia nacional por el terremoto.

Zambrano recordó que la Batalla de Pichincha selló la independencia del país y acotó que las Fuerzas Armadas son parte integral del Estado ecuatoriano y "que nos debemos a él". 

Señaló que los soldados no dudaron en cooperar para apoyar a las familias y damnificados del fuerte movimiento telúrico. Señaló que las FF.AA. de manera ordenada, en coordinación con el Gobierno Nacional, cumplieron una "tarea titánica" en actividades como remoción de escombros, entrega de ayuda (alimentos y agua), asistencia médica, transporte aéreo y marítimo de provisiones y donaciones, administración de albergues, así control de zonas afectadas por el terremoto. 

El ministro Patiño también ocupó parte de su discurso para destacar la labor de los soldados ecuatorianos durante los trabajos de recuperación de las zonas afectadas por el terremoto. "Somos patriotas los que ponemos primero el bienestar común, la equidad, la justicia", indicó el funcionario. 

El secretario de Estado informó que los militares permanecerán en las zonas perjudicadas por el sismo hasta que sean reconstruidas. 

Una ofrenda en el Mausoleo

Este acto estuvo acompañado por otra actividad simbólica que se desarrolló en los alrededores de la Plaza Grande. A las 08:30, el presidente de la República, Rafael Correa, realizó entrega de Ofrenda Floral en mausoleo del Mariscal Antonio José de Sucre. 

El acto se desarrolló en presencia de César Navas, ministro Coordinador de Seguridad y Ricardo Patiño, ministro de Defensa. Para esta ofrenda, los balcones de la Plaza Grande fueron decoradas con la bandera tricolor. Además, varios cuerpos militares y policiales rodearon el lugar. 

En una ceremonia de alrededor de 15 minutos, el Jefe de la Nación salió y a paso breve saludo a los asistentes en la Plaza e ingresó al Palacio presidencial. Luego de 40 minutos, en una fuerte caravana de motos, el mandatario salió para dirigirse hacia la Asamblea Nacional. (I)