Ya sea que esté jubilado o ingresando al grupo de los adultos mayores, la buena administración de su dinero es algo indispensable, especialmente en esta etapa en que las necesidades cambian, los gastos y las prioridades son diferentes.

Habrá muchos que piensen en su jubilación y descansar de toda una vida de trabajo, sin preocupaciones. De allí que vale la pena adquirir hábitos financieros saludables y recordar que conforme pasan los años aparecen gastos y cuidados especiales que anteriormente no figuraban en el presupuesto.

Un buen presupuesto es parte de las herramientas para un manejo adecuado de las finanzas en esta etapa. Para ello hay que considerar los ingresos fijos, tales como el sueldo por concepto de jubilación, aportes económicos de familiares o ingresos de arriendo de alguna propiedad. 

Lo ideal es mantener un registro para ver cuáles son sus gastos variables y fijos, teniendo en cuenta cuánto dinero se destina a alimentación, vestimenta, vivienda (arriendo o pago de servicios básicos) salud y transporte, y de esta forma elaborar un presupuesto real.

Con la información del registro de gastos del mes se debe tomar en cuenta gastos eventuales, imprevistos y de emergencia, y elaborar un presupuesto incluyendo metas de ahorro.

Para ajustar el presupuesto se sugiere utilizar la técnica PERC, la cual permite analizar qué gastos se pueden: postergar, eliminar, reducir y conservar.

Una vez identificados los ingresos y egresos, se debe analizar los gastos indispensables. Estos rubros son:

*Salud: Se debe incluir citas médicas (considerando la periodicidad), medicinas, seguro médico o social. Adicional a esto, no se deben dejar de lado los gastos extras por emergencias que pueden surgir.

*Movilización adecuada: Se deberá considerar el transporte adecuado para este grupo.

*Alimentación adecuada: Este punto también es muy importante, ya que los cuidados son más estrictos en este período. 

El ahorro es importante  
El ahorro permite cubrir las necesidades básicas y los imprevistos de manera oportuna. Existen varios métodos específicos para personas de la tercera edad, tales como: beneficiarse de los descuentos especiales por la edad y beneficios tributarios.

De igual manera, se recomienda destinar entre el 5% al 10% del sueldo de la jubilación para el fondo de ahorro.

La clave, sin embargo, es el ahorro previo (a lo largo de los años). Este permite reunir una cantidad importante de dinero para afrontar las necesidades de la tercera edad. Para que esos recursos sean rentables en esta época es recomendable invertir. Para ello existen varios productos financieros y no financieros de inversión: acciones de empresas, pólizas o bienes raíces.

Aprovechar los beneficios de la tercera edad 
Las personas de la tercera edad tienen varios beneficios a los que pueden acceder para recortar gastos o generar ingresos extras, por ejemplo:

Servicios de transporte: El transporte urbano, interprovincial, por tren o avión, ofrecen descuentos en el costo del pasaje, dependiendo del medio de transporte puede llegar hasta el 50%.

Servicios básicos: Las planillas de energía eléctrica que consumen hasta 120 kilovatios, reciben descuento del 50%. Consumos de agua y teléfono también gozan del beneficio.

Eventos públicos: Los adultos mayores reciben 50% de descuento en el valor de las entradas. Adicionalmente, tienen acceso a una fila especial donde puede acceder con mayor rapidez.

Beneficios tributarios: Pueden recibir la devolución de una parte del Impuesto al Valor Agregado (IVA). Este valor corresponde a $94,56 en rubros de gastos de vivienda, alimentación, salud, educación y vestimenta.

Medidas de seguridad  
Es importante designar a alguien de suma confianza para evitar posibles estafas. Para ello, lo más recomendable es mantener una reunión inicial entre los miembros de la familia, los más cercanos a la persona de la tercera edad (hijos sobre todo) y establecer las responsabilidades del elegido, recomienda Elizabeth Arellano, ejecutiva del programa de Educación Financiera de Produbanco.

Además, se debe fijar la entrega de recibos de cada movimiento a lo largo del mes. 

Las alertas enviadas por las entidades financieras vía mensajes de celular es otro método efectivo para llevar un control del manejo del dinero. Se pueden registrar dos números, uno del dueño de la cuenta y de un tercero, para saber qué retiros o compras se van realizando.

En el caso de que sea la misma persona quien maneja las cuentas, se aconseja pedir ayuda a una persona de confianza para que le brinde compañía en los trámites en el banco o en establecimientos comerciales para hacer pagos o compras. Esta misma persona puede ser el apoyo para manejar las cuentas bancarias.

También es importante revisar las facturas y los estados de cuenta para identificar posibles usos indebidos de la tarjeta. Es básico anotar el día, fecha y nombre de la persona que hizo el trámite para identificar posibles movimientos sospechosos.

¿Se acaba la vida productiva? 
Los expertos señalan que cuando las personas persiguen sus sueños y propósitos no hay edad para ponerles fin. Ello, a pesar de que a los 65 años deberían cobrar su jubilación y tener ahorros e ingresos.

No obstante, aún pueden emprender nuevos desafíos. Una persona que solo haya centrado en la jubilación de su trabajo, según los expertos, pueden buscar mecanismos para emprender un negocio. Recomiendan unirse con la familia para sobrellevar la situación económica y aprovechar la jubilación.  (I)