La muerte el domingo de una niña elevó a siete el número de fallecidos en el accidente ocurrido el sábado en el Rally de A Coruña, cuando un coche perdió el control y arrolló a una multitud de espectadores.

La niña se encontraba ingresada en coma en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Materno Infantil de A Coruña, informaron el domingo varios medios. Ningún portavoz oficial confirmó la información.

La pequeña era una de los seis lesionados que seguían ingresados este domingo, después de que, a lo largo de la jornada fueran dados de alto diez de los 16 heridos causados por el accidente.

Tras el fallecimiento de la niña, siguen hospitalizados otro menor y cuatro adultos, uno de ellos en estado grave en ese mismo hospital, según varios medios.

El accidente, el más grave ocurrido en España en una prueba deportiva de este tipo, se produjo sobre las 20h locales del sábado, cuando uno de los pilotos participantes en la prueba perdió el control de su coche.

Un vídeo difundido por las cadenas de televisión muestra al coche saliéndose de la ruta, levantando una densa nube de polvo en uno de los tramos del rally.

En un mensaje en Twitter, el Consejor Superior de Deportes (CSD) de España "lamentó profundamente el accidente" y dio sus "condolencias a las familias y amigos de los fallecidos".

También lo hizo el presidente del Gobierno. "Mi sentido pésame por los fallecidos y deseos de pronta y completa recuperación de los heridos", dijo Mariano Rajoy en la misma red social.

De la misma manera, el mundo del deporte español se unió el domingo al duelo por los fallecidos en el accidente.

La selección española de fútbol guardó un minuto de silencio antes de su entrenamiento, lo mismo que hicieron los corredores de la Vuelta Ciclista a España antes de iniciar la etapa del día.

La competición coruñesa es una carrera relativamente menor que no forma parte del Campeonato Mundial de Rallys. (I)