Su participación en la maratón de Duluth- Minessota, Estados Unidos, efectuada hace cinco semanas, no estaba programada, pero el hecho de que la atleta azuaya María Elena Calle, residente en aquel país, haya registrado su inscripción en tal competencia para buscar una marca olímpica  “obligó” a Rosa Alba Chacha a competir.

Al tener la mejor marca nacional, Chacha ya estaba dentro de los Juegos Olímpicos de Londres, pero si Calle la pasaba, ella sería la que representaría al país en Londres. Pero Chacha no tuvo problemas en mantener sus tiempos y no hubo sorpresas en Minessota.

El plan de carrera fue mantenerse junto a la compatriota durante todo el recorrido y lo cumplió sin forzarse, pese a que no había entrenado lo suficiente, debido a  que el evento la tomó por sorpresa, más aún  al conocer las pretensiones de la maratonista cuencana.

Rosa Alba  cumplió con precisión lo dispuesto por los técnicos y en la prueba mantuvo esa tónica; sin embargo, a la altura del km 40, Calle se retrasó y se alejó de la ambateña, quien ante el agotamiento de su compañera de carrera, bajó su ritmo y llegó trotando a la meta, ya sin la presión de la cuencana.

Así, Rosa Alba selló su clasificación a los JJ.OO., a los que accedió gracias a su tiempo de 2 horas y 37 minutos, obtenido en la maratón de Buenos Aires, en octubre de 2010.

La de Minessota fue la competencia con la que Chacha cerró su preparación  en pruebas oficiales.  La fondista compite hoy (05:00 de Ecuador) en Londres. 

Hasta el momento,  Chacha ha intervenido en 4 maratones este año. Su preparación no ha tenido pausas. En la primera semana de enero corrió la Medio Maratón de Orlando, habiendo alcanzado el primer lugar con un crono de 1.16.00; de igual manera en la carrera organizada por el  Deportivo Cuenca en la capital azuaya, la que  también ganó.

Es una agradecida con Dios porque le ha dotado de un gran espíritu y cuando se propone  hacer las cosas que se traza, las hace de la mejor manera; además dice que se considera muy buena persona y que da todo de sí “porque hay niños que quieren ser como tú, por eso siempre hay que dar un buen ejemplo”.

El atletismo le ha dado la oportunidad de labrarse un porvenir. Ha logrado construir una bonita y elegante casa  en Colinas del Norte, en el barrio La Planada, en Quito, y espera estrenarla en poco tiempo, para residir allí junto a su esposo e hija.

Al momento radica en casa de sus suegros, pero  tener algo propio ha sido su gran ilusión y aquello le transmite paz y tranquilidad, habiendo logrado su propósito con el fruto de sus ahorros y una buena administración de los recursos económicos ganados muy duramente en cada una de sus carreras.

Sus técnicos Freddy Vivanco y Jaime Catota son los encargados de planificar sus prácticas. El pasado mes de abril realizaron una valoración del nivel en que se encuentra. Chacha tuvo la última parte de sus entrenamientos en la parroquia de Nono (a 30 minutos de Quito), por ser un lugar de altura; luego descendió al nivel del mar (Salinas) en donde realizó un campamento para pulir ciertos aspectos y dejar listo su desplazamiento.

Llegó días antes para permanecer en un nuevo campamento por pocos días y luego quedar concentrada en  la villa olímpica.

Rosa Alba apunta a figurar a nivel olímpico, a pesar de que la prueba es sumamente fuerte porque tiene  adversarias de gran experiencia a nivel mundial