En Quito, el proceso de Revisión Técnica Vehicular (RTV) empezó de forma atípica este 2022. El proceso que comúnmente iniciaba en febrero y abarcaba un dígito por mes, comenzó en julio y ahora se hace dos dígitos por mes.  

Esto implica una mayor capacidad de gestión para completar el proceso en tan poco tiempo. En el 2021, la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) informó que 375.359 aprobaron la RTV; la directora de la entidad, Silvana Vallejo, manifestó que hasta el momento se han realizado 98.086 entre los dígitos 1,2, 3 y 4.

Pero ¿por qué el proceso demoró seis meses en empezar? Autoridades del Municipio de Quito, la AMT y ex funcionarios dan una explicación respecto al tema.

Omar Cevallos, presidente de la Comisión de Movilidad del Municipio de Quito, declaró que este es un problema heredado por no haber hecho un proceso de licitación hace dos años, con la empresa proveedora del servicio.

“A inicios de año un informe de Contraloría no permitía seguir pagando a los proveedores bajo convenio de pago. Se tuvo que recalendarizar todo el proceso y  no empezó como debería, esto provocó rezagos en la atención”, mencionó.

Origen del problema 

Carlos Páez fue Secretario de Movilidad de 2009 a 2013 y concejal de Quito de 2014 a 2019, y explicó a Diario El Telégrafo el origen de los inconvenientes con la RTV. Al igual que Omar Cevallos, manifiesta que este es un problema creado en el 2018.

Los contratos para la operación de la RTV se firmaron a finales del 2002 y el proceso arrancó en 2003. Tenían una vigencia de 10 años con opción a una ampliación de cinco más, si la evaluación era satisfactoria para ambas partes.

Páez fue Secretario de Movilidad en la época en la que se debía decidir si ampliar o no el contrato por cinco años. “Las evaluaciones eran adecuadas por el rendimiento de los contratistas, el ejercicio de planificación y administración a cargo del Municipio marchaba bien, esto hizo que el servicio tenga los niveles esperados”, declaró. 

Tras esta ampliación, los contratos debían concluir legalmente en julio del 2018, pero para no cortar la RTV a mitad de año, se acordó que finalizara a finales del 2017.
Es decir, desde el 2013, tanto el Municipio como la AMT sabían que debían tener un nuevo contrato para dentro de cinco años. 

Para Páez había dos opciones: “Que el Municipio se haga cargo de la operación de los centros de revisión vehicular o levantar un concurso para contratar nuevos servicios de operación. Había tiempo suficiente para hacerlo” dijo el ex secretario de movilidad. 

Sin embargo, para finales del 2017 no pasó ninguna de las dos opciones, lo que se hizo fue prorrogar la vigencia del contrato firmado en 2002 por un año más. Esta prórroga fue extendiéndose año tras año hasta mediados del 2021, que apareció el informe de Contraloría.

¿Qué pasará ahora?

Silvana Vallejo, Directora de la AMT, manifestó que el contrato actual rige hasta junio del 2023 y que hay el tiempo suficiente para realizar nuevos procesos de licitación. De ser necesario se aplicará una extensión. 

Omar Cevallos mencionó que desde la Comisión de Movilidad, aspiran que la AMT realice los procesos contractuales para una nueva operación. El concejal no descarta la opción que el Municipio se haga cargo de la RTV, aunque todo dependerá del estudio de mercado de la AMT.

Tras consultarle esta posibilidad, Silvana Vallejo mencionó que es muy costoso y que es más eficiente que la empresa privada esté al frente de la operación.  

Por ahora se debe terminar el proceso de revisión vehicular hasta finales de año, pero a la par se debe concretar qué pasará con la operación para el siguiente año. Las autoridades aspiran que el proceso empiece en febrero del 2023, tal como se lo hacá antes.