El Ministerio de Desarrollo Humano y Vivienda (Miduvi) hizo un levantamiento técnico de las casas golpeadas por los desastres naturales en Zaruma, La Maná y Quito. Al constatar el grado de destrucción de las casas, plantea la posibilidad de entregar nuevas viviendas de interés público a las personas mayormente afectadas. 

Autoridades de la cartera de Estado, en coordinación con la Secretaría de Seguridad y Gobernabilidad del Municipio de Quito, recorrieron las zonas más afectadas por el aluvión en el sector La Gasca. En el lugar aún se realizan labores de remoción de escombros. 

Allí, 75 viviendas fueron evaluadas por el Ministerio, de las cuales 29 se encuentran en condición de habitabilidad, 23 tienen uso restringido porque presentan afectación en la planta baja, 14 presentan afectación de los cerramientos, una califica como no habitable y ocho colapsadas. También identificó las necesidades básicas que se requieren para que las casas sean habitables.

Ante esta realidad, el Miduvi levantó  información "de posibles beneficiarios de vivienda de interés social de los núcleos familiares afectados", indicó este miércoles 2 de febrero del 2022, a través de un boletín de prensa. Este mismo proceso se realizó en La Maná y Zaruma. 

Darío Herrera, ministro del ramo, se reunió con el alcalde de lo localidad y autoridades del Servicio Nacional de Gestión Riesgos y Emergencias (SNGRE), Fuerza Armadas del Ecuador (FF.AA.) y el Ministerio de Transporte y Obras Pública (MTOP), para constatar el polígono de afectación en viviendas por el desbordamiento de ríos en los cantones La Maná, Pujilí, Pangua y Sigchos. 

"De las 85 viviendas afectadas, identificamos las necesidades de 34, de las cuales 12 presentan afectación total", se detalló. Hasta el viernes 4 de febrero, junto con las instituciones involucradas, el Miduvi contará con un plan para la reubicación de las familias afectadas. 

Por último, en Zaruma, el Ministerio informó que trabaja junto con instituciones públicos de socorro y control. Allí existen zonas que presentan gritas y fracturas, lo que motivó a una evaluación exhaustiva para detectar el estado real de los hogares.