“Me vacunaron en el bus”, dice joven que ‘sortea’ la inseguridad en los buses de Quito
Elena, de 27 años, acostumbra a llevar el pasaje para el bus y, al menos, 45 centavos más para aquellas personas que suben a los buses, piden dinero y amenazan a los usuarios. Según la joven, esta realidad se vive a diario en el sistema de transporte público, en especial, en los buses que van hacia el valle de Los Chillos, a las afueras de Quito.
La noche del jueves, 09 de noviembre de 2023, vivió una de sus peores experiencias desde la estación de El Playón de La Marín. Un hombre subió al bus y dijo al conductor: “Déjame robar un ratito”. Los usuarios se asustaron; empezó a pedir dinero y a decir frases “Yo podría hacerles cosas malas, pero no quiero por eso les pido”.
Estas y otras frases son comunes, dice Elena. Por lo que ha optado por llevar monedas para darles a aquellas personas y evitar una posible agresión. “He tenido que llevar unos 15 centavos para cada persona que se sube y son mínimo tres. Es como que nos vacunaran en el bus”.
¿Qué hacen los conductores? Ellos solo advierten. “Básicamente cuando llegamos a sitios peligrosos nos dicen que guardemos nuestras pertenencias, pero siguen permitiendo que se suban al bus”.
Para esta joven, subirse a un bus es un riesgo, incluso, en las paradas de los buses. Semanas atrás, esperaba en una de las paradas de la avenida General Rumiñahui, conexión Quito-valle de Los Chillos. Allí, un hombre le pidió que le entregara todo su dinero. Ella lo hizo y no prestó resistencia.
Emi, de 23 años, también ha vivido situaciones similares en los buses. Ella viaja a diario del sur al norte de Quito, por motivos de trabajo. Semanas atrás, en el sector del Pintado, en el sur, se subieron personas con una pistola y pidieron dinero. “Todos les dieron, porque tenían miedo de las agresiones”.
¿Cómo actúa el Municipio de Quito frente a la inseguridad en los buses?
El Municipio de Quito ha realizado acciones para garantizar la seguridad en la ciudad, como la readecuación de más de 18 Unidades de Policía Comunitaria (UPC). A esto se suma el trabajo que se realiza en conjunto con la Policía y militares para resguardar la seguridad en el transporte municipal.
Además se ha conversado con los transportistas para elaborar un mapa con las zonas de mayor riesgo de la ciudad o zonas de calor, es decir, donde se identifican sitios peligrosos para coordinar controles con los policías. Lo indicó Alex Pérez, secretario de Movilidad.
Pérez también aclaró que si bien es cierto la seguridad no es una competencia total de los municipios han realizado acciones para garantizar la seguridad de las personas.
Priorización de ocho indicadores para mejorar el transporte público
Cumplimiento de los tiempos de viaje, intervalos de tiempo, horario de inicio y cierre de operaciones, rutas no autorizadas, tasas de incidentes, velocidad operacional, capacitaciones, siniestros de tránsito son parte de los indicadores que se priorizaron desde el Municipio de Quito.
La idea es que los fiscalizadores den seguimiento al cumplimiento de estos indicadores. Antes ellos -dijo Pérez- su función era revisar situaciones con menor importancia, como grafitis en los buses o estado de los asientos del automotor. Hoy esperan cambiar esa visión.
¿Qué pasará en el 2024 con respecto al transporte público? Pérez indicó que 2024 será el año en el que se dará una transformación del sistema de transporte público. Por ejemplo, regirá el nuevo sistema de recaudación que aglutinará a todos los transportistas convencionales y municipales. Con una tarjeta se pagará desde el bus hasta el Metro de Quito.
La expectativa es alta…