En un mundo donde las redes sociales y la publicidad en línea desempeñan un papel crucial en la formación de la percepción de la belleza y el cuerpo ideal, es esencial analizar las razones detrás de la tendencia de los jóvenes hacia cuerpos delgados y tonificados. Las respuestas obtenidas de un proyecto de investigación arrojan luz sobre este fenómeno y nos hacen reflexionar sobre su impacto en la salud mental y emocional de los jóvenes.

La influencia de las redes sociales y los influencers en la construcción de ideales de belleza es innegable. El estudio “Digital fit: Influencia de las redes sociales en la alimentación y en el aspecto físico de los menores” concluye que el 27,8% de los jóvenes es un cuerpo delgado y tonificado. Los adolescentes son constantemente bombardeados con imágenes de cuerpos esbeltos y tonificados, promovidos por celebridades e influencers que son presentados como modelos a seguir. Beatriz Feijoó Fernandez, miembro de este estudio y docente de la Facultad de Empresa y Comunicación de UNIR (Universidad Internacional de La Rioja), menciona que las figuras públicas transmiten un mensaje persuasivo sobre cómo debería lucir el cuerpo "perfecto", generando presión sobre los jóvenes para alcanzar esos estándares.

La publicidad en línea también juega un papel importante en la promoción de productos y servicios relacionados con la apariencia física. Los jóvenes están expuestos a anuncios de dietas, productos de belleza, gimnasios y procedimientos estéticos. Esta exposición puede distorsionar la percepción que tienen los jóvenes sobre lo que es un cuerpo "normal" y saludable. Las imágenes retocadas y los mensajes convincentes crean una ilusión de que estos cuerpos son alcanzables con facilidad.

Beatriz Feijoó Fernandez, docente de la facultad de empresa y comunicación de UNIR (Universidad Internacional de La Rioja), explica que a pesar de que cada vez más voces defienden la diversidad de cuerpos y el movimiento "body positive", los jóvenes todavía aspiran a un ideal de cuerpo delgado y tonificado. Esta desconexión entre la realidad y las expectativas puede tener un impacto perjudicial en la autoestima de los jóvenes. A menudo, las expectativas poco realistas llevan a sentimientos de frustración, ansiedad e incluso a la adopción de hábitos no saludables.

En un entorno digital dominado por la búsqueda del cuerpo "perfecto", los padres y cuidadores desempeñan un papel fundamental en la formación de una autoimagen positiva en los jóvenes. Aquí hay algunas recomendaciones para abordar esta cuestión:

• Diálogo Abierto y Empático: Establecer un espacio de comunicación abierta y libre de juicios, donde los jóvenes puedan expresar sus sentimientos y preocupaciones sobre su apariencia física sin temor a ser.
• Educación sobre Medios Digitales: Enseñar a los jóvenes a ser críticos con la información y las imágenes que consumen en línea. Fomentar su capacidad para cuestionar las representaciones idealizadas de los cuerpos y promover la diversidad.
• Enfatizar la Salud en Lugar de la Apariencia: Ayudar a los jóvenes a comprender que la salud es más importante que la apariencia física. Promover un enfoque en la actividad física, la alimentación balanceada y el bienestar
• Modelar una Actitud Positiva hacia el Cuerpo: Los adultos deben ser modelos a seguir al mantener una actitud positiva hacia sus propios Evitar críticas negativas sobre la apariencia física y enfocarse en el amor propio y la autoaceptación.
• Promover la Diversidad de Cuerpos: Fomentar la apreciación por la diversidad de tallas y formas corporales. Explicar que la belleza viene en todas las formas y tamaños, y que no existe un único estándar de belleza válido.