“Fue una vocación que me llegó en ese momento para salvarle la vida”. Así relata el agente de tránsito Henry Mena al episodio que protagonizó la tarde del martes 6 de octubre de 2020 en Quito, al impedir el suicidio de una mujer.

El uniformado de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) evitó que Dolores María se arrojara desde un puente peatonal en la Avenida Mariscal Sucre y Cusubamba. Los problemas económicos y personales la hicieron tomar una decisión que por poco fue fatal.

Mena conversó con El Telégrafo sobre la fracción de segundos que marcaron entre la vida y la muerte de la mujer. Durante un patrullaje le alertaron que una persona estaba colgada en la baranda del puente. Los agentes observaron que una señora, de aproximadamente 50 años, tenía medio cuerpo por fuera de la estructura.

“Subimos lentamente las gradas para conversar con ella. Era la primera vez que nos pasaba algo así”, relató. Mena tuvo que actuar en cuestión de segundos porque Dolores tenía toda la intención de terminar con su vida.

“Solo le faltaba un impulso para botarse, pero Dios le puso unos ángeles que llegamos para salvarle la vida”, comentó. Los dos agentes subieron las escaleras sin presionados por la situación pero sin prisa para evitar una desgracia. Ya en la parte de arriba trataban de convencerla que saltar no era la mejor solución a sus problemas.

Personal de la Agencia Metropolitana de Control (AMC) también arribó al sitio y subió el puente por el extremo contrario. La mujer regresó a su derecha para observarlos y ese fue el instante en el que Mena no dudó para lanzarse por ella.

“Sentí que Dios me empujó y me dijo ‘anda donde la señora, cógele y abrázale para que no lo haga’. Eso hice, cuando se descuidó me abalancé y la traje hacia adentro del puente”, narró. Abrazándola muy fuerte le recordó que la vida es hermosa, mientras la mujer no paraba de llorar porque las deudas la tenían desesperada. El emotivo momento se grabó a través de una cámara ubicada en el bolsillo del pecho de Mena, quien filmó la escena como parte del protocolo de seguridad.

Nuestro trabajo diario en la ciudad nos vuelve más cercanos con las personas, al punto de estar en el momento en el que nos necesitan. Velamos por la seguridad vial, pero sobre todo por el bienestar de cada vida en #Quito. pic.twitter.com/2qpKyPpjHY

— JUAN AGUIRRE (@juanmaguirre1) October 7, 2020

En ese momento, Dolores no quiso identificarse ni revelar dónde vivía. Solo decía, entre lágrimas, que no tenía para pagar el arriendo y había sido desalojada. Tampoco tenía para comer. “El corazón se me partía porque muchas personas se encuentran en esa situación por la pandemia, agregó.

La Policía Nacional se llevó a Dolores hacia su vivienda, en el sector de Rumichaca y Cusubamba, donde fue recibida por un hijo.  Mena y otros miembros de la AMT planean visitarla para brindarle ayuda.

El agente buscó al subteniente de la Policía que lideró el operativo de asistencia a la emergencia, tras el rescate, para obtener la dirección de la mujer y el número de su hijo. Espera contactarse con él para llevar víveres a la señora.

“A la gente le recuerdo que Dios aprieta pero no ahorca. Siempre hay forma de salir adelante. La vida es hermosa, todos tenemos problemas peros son solucionables”, declaró.

Mena se convirtió en un héroe por arriesgar su propia vida en una situación a la que no estaba preparado. El rescate de intentos de suicidio lo realizan otro tipo de profesionales, pero en este caso, el agente no dudó ni en un segundo. “No me importaba si quizás por mala suerte me vencía el cuerpo de ella y ambos caíamos para abajo. Simplemente traté de hacer lo que más pude y salvarla”, señaló.

El director general de la AMT, Juan Manuel Aguirre, llamó a los agentes Henry Mena y Óscar Zurita para felicitarlos por su gran labor. El jueves serán condecorados en un evento público. Mientras tanto también se organiza la entrega de ayuda humanitaria para Dolores. (I)