Madrid.-

Al menos 36 personas fueron detenidas y otras 50 resultaron heridas durante la violenta represión por parte de policías antidisturbios en contra de las multitudinarias manifestaciones que exigen un cambio constitucional en España.
Los manifestantes trataron de tomarse simbólicamente el Congreso de los Diputados en Madrid, mientras pedían la dimisión del jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, y un proceso constituyente.

Según datos de las autoridades, alrededor de 6 mil personas, aunque los manifestantes aseguan que fueron más de 50 mil, participaron, la tarde de ayer, en la protesta bajo el lema “Rodea el Congreso”, después de haber marchado en dos manifestaciones por el centro de Madrid. Los convocantes, la Coordinadora 25S y la plataforma ¡En Pie!, pretendían cercar la Cámara Baja parlamentaria mientras celebraba, como todos los martes, su sesión plenaria.

Más de 1.000 policías antidisturbios estaban desplegados en la zona del Congreso, en la capital española y en la zona que agrupa a los principales museos de Madrid, así como en las inmediaciones de la Puerta del Sol, que albergó las acampadas del movimiento de los indignados en la primavera de 2011.

En un momento dado, la Policía cargó con sus porras contra decenas de los manifestantes, que se habían concentrado junto a las vallas situadas para proteger el Congreso, y arrestó a trece jóvenes que intentaron traspasarlas. Previamente muchos de los manifestantes habían lanzado objetos contra los agentes, mientras que otros intentaban calmar a los alborotadores.

Posteriormente, la Policía volvió a cargar y disparar pelotas de goma contra los manifestantes que se concentraron en la Plaza de Neptuno cuando insistían en rebasar el perímetro policial. En los últimos incidentes hubo nuevas detenciones y algunos heridos, entre ellos un policía nacional a quien lanzaron una lata de refresco.

Entre tanto, los parlamentarios celebraban una sesión plenaria en el hemiciclo y solo algunos diputados del grupo de la Izquierda Plural se acercaron a la multitud que se agolpaba en el exterior. El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, defendió el derecho de manifestación, pero indicó que llegar a una confrontación con la soberanía nacional supondría “una agresión al sistema democrático”.

Mientras se desarrollaba la protesta en Madrid, en Barcelona, al grito de “ladrones” y “culpables”, alrededor de medio millar de manifestantes del 25S se concentraron ante el Parlamento regional de Cataluña, para increpar a los diputados y miembros del Ejecutivo.

Andalucía pedirá rescate

Los españoles protestan porque la crisis económica, consecuencia del estallido de la burbuja inmobiliaria, condujo a España a la recesión, dejando a millones de personas sin trabajo y familias en la pobreza.

Pero los manifestantes consideran que las políticas del gobierno, que incluyen recortes de gastos y aumento de impuestos con la finalidad de reducir el déficit público, afectan a los más pobres.

En tanto, Andalucía estudia recurrir al fondo de rescate del Gobierno español para obtener un respaldo financiero de 4.900 millones de euros, informó la jefa de prensa de la Consejería de Hacienda de la Junta de Andalucía, Antonia Peinado. Andalucía se suma así a Cataluña, Valencia y Murcia, que con anterioridad pidieron acogerde a dicho fondo.

Cataluña decidirá en las urnas independencia

El presidente de Cataluña, Artur Mas, convocó ayer elecciones anticipadas para el 25 de noviembre y afirmó que llegó “la hora de ejercer el derecho de autodeterminación” en esta región del nordeste de España.

Para Mas, la celebración de los comicios dos años antes del fin de la legislatura permitirá a los catalanes expresarse en las urnas sobre su pedido de independencia, que fue reclamado al Gobierno español en una manifestación el 11 de septiembre pasado.(AFP)