Este lunes 6 de agosto, el mandatario saliente de Colombia, Juan Manuel Santos, juzgó como “insólita” la acusación de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, que lo involucra en un supuesto complot para asesinarlo mediante drones con explosivos.

En la víspera de dejar el poder en manos de su opositor Iván Duque, Santos sostuvo que de todas las “locuras” de acusaciones que le han achacado, la de Maduro es la más extraña.

“Ayer (domingo) me encuentro que hay todavía otra más insólita: que estoy con la inteligencia americana, con la derecha venezolana, armando complots para asesinar al presidente de Venezuela. ¡Por Dios!”, exclamó Santos durante un foro en Bogotá.

El presidente, quien en días pasados afirmó que veía “cerca” la caída de Maduro por cuenta de la severa crisis económica en Venezuela, agregó que el fin de semana “estaba en cosas mucho más importantes, estaba bautizando a mi nieta”.

Maduro responsabilizó a la “ultraderecha”, a la oposición, y al presidente colombiano del incidente que se produjo durante una parada militar el sábado en Caracas.

“Santos está tras este atentado”, declaró Maduro, sin ofrecer evidencias de sus señalamientos.

Venezuela envió este lunes 6 de agosto una carta de protesta a Colombia por no rechazar la violencia e insistiendo en sus sospechas, reveló la canciller de Colombia, María Holguín.

Santos ha liderado la presión internacional sobre Maduro, con cuyo gobierno mantiene prácticamente congeladas todas las relaciones.

Este hecho evoca al impasse registrado en agosto de 2010 cuando el presidente saliente de Colombia, Álvaro Uribe, interpuso una demanda contra su colega venezolano, Hugo Chávez, ante la Corte Penal Internacional por delitos de lesa humanidad.

Entretanto, el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, advirtió que irá tras aquellos que “conspiren contra la paz”. Confirmó que 6 hombres fueron detenidos en relación con el atentado. (I)