Unos 130.000 sirios kurdos refugiados en Turquía para escapar del Estado Islámico
El gobierno turco informó que al menos 130.000 sirios, en su mayoría kurdos, cruzaron la frontera para refugiarse en los últimos días en Turquía para huir del avance del grupo Estado Islámico (EI) en el noreste de Siria. El viceprimer ministro Numan Kurtulmus sostuvo que se ha tomado "todas las medidas necesarias sin continúa el flujo de desplazados".
"Estamos preparados para la peor de las situaciones. Estamos haciendo todo lo posible para recibir a la gente que pasa por Turquía", agregó Kurtulmus. Decenas de personas esperaban entrar.
Los combatientes sunitas ultrarradicales empujaron a esos habitantes al éxodo hacia la vecina Turquía, apoderándose de al menos 64 aldeas de la región de Ain al Arab (Kobane en kurdo) desde la semana pasada.
La frontera está abierta en el único paso de Mursitpinar (sudeste, provincia de Sanliurfa), "para proceder a controles de identidad y dar los primeros auxilios, vacunar a esas personas en caso de necesidad", explicó en Ankara la dirección de Gestión de Crisis y Catástrofes Naturales.
Turquía ya recibió a 1,5 millones de personas que escaparon a la guerra en Siria desde 2011.
Según el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), Rami Abdel Rahman, Ain Al Arab está "totalmente rodeada" por el EI.
Para evitar la caída de la tercera ciudad kurda de Siria, que permitiría a los yihadistas el control total de una larga franja de la frontera sirio-turca, el partido kurdo PKK de Turquía exhortó este lunes a sus militantes a cruzar la frontera para combatir.
Los opositores sirios también llamaron a luchar a la coalición internacional dirigida por Estados Unidos, cuyo presidente Barack Obama afirmó estar dispuesto a ordenar ataques aéreos contra EI en Siria. Por el momento, no se ha señalado ninguna acción al respecto.
Mientras, en un mensaje publicado este lunes en varios idiomas, el grupo EI lanzó a sus fieles un mensaje instándolos a asesinar a los ciudadanos de los países aliados a EE.UU. en la coalición que busca destruirlo.
Pese a acoger a los refugiados, el gobierno turco es acusado de mantener relaciones ambiguas con los yihadistas extremistas. El domingo se produjeron en esta frontera violentos enfrentamientos entre la policía turca y militantes kurdos.