Una persona falleció y otras 23 resultaron heridas a causa de un fuerte terremoto que sacudió anoche el norte de Tailandia, mientras las réplicas continuaban sacudiendo la región montañosa muy frecuentada por turistas.

La víctima, una anciana de 83 años de edad, murió apalastada por una pared de su casa que se derrumbó como consecuencia del sismo, de magnitud 6 grados en la escala de Richter.

La sacudida causó el desprendimiento de paneles del techo del aeropuerto de Chiang Rai y grietas en varios edificios, y obligó a varios vecinos a pasar la noche en la calle.

En una carretera de la zona se abrió un boquete de un metro de ancho y al menos cinco de largo mientras que además se derrumbaron campanarios y estructuras diversas de varios templos budistas, incluidos el turístico Wat Rong Khun o Templo Blanco, que ha sido cerrado a los visitantes.

El sismo tuvo lugar en el distrito de Mae Lao, en el centro de la provincia de Chiang Rai y con una población de unas 31.000 personas.