UE busca acercar posiciones sobre ahorro de energía
Los Veintisiete tratarán de acercar posiciones y salvar los escollos que obstaculizan un acuerdo para adoptar una normativa a nivel europeo que imponga medidas de ahorro de energía a los países de la UE en el Consejo de Ministros de Energía que se celebra mañana en Bruselas.
Este consejo será además la primera vez que José Manuel Soria acude a Bruselas como ministro del Gobierno español de Mariano Rajoy.
La directiva de eficiencia energética es una prioridad para Dinamarca, país que ejerce la presidencia rotatoria del consejo este semestre y que se ha propuesto lograr un acuerdo que dé luz verde a esta cuestión antes del próximo mes de junio.
"Es un documento difícil", reconocieron fuentes diplomáticas, que explicaron que la reunión de mañana servirá para poner de manifiesto las posiciones de los países y el verdadero margen que existe para negociar y sellar un consenso, que inevitablemente incluirá concesiones.
El Consejo de Ministros de Energía celebrado en noviembre pasado puso de manifiesto la unanimidad de los Veintisiete en un punto: la necesidad de dotar de "flexibilidad" a cualquier acuerdo que se alcance.
La Comisión Europea (CE) ya aceptó rebajar sus pretensiones iniciales y presentó a los Estados miembros una serie de medidas concretas de obligado cumplimiento, orientadas a lograr el objetivo voluntario asumido por la Unión Europea de reducir en un 20 % su consumo energético para 2020.
Las principales medidas propuestas por la CE son la obligación de que las administraciones públicas renueven cada año un 3 % de sus edificios para hacerlos más eficientes, que las compañías energéticas reduzcan en un 1,5 % anual el volumen de sus ventas de gas y electricidad con respecto al año anterior y que las plantas productoras aprovechen también el calor que generan.
Los países en principio se mostraron favorables a establecer medidas de ahorro en lugar de adoptar compromisos vinculantes de cara a una fecha determinada, como se ha hecho en otros casos, como para la reducción de las emisiones de dióxido de carbono (CO2), que para 2020 deberán bajar en un 20 % respecto a 1990.
Sin embargo, los Veintisiete quieren disponer de más flexibilidad en el cumplimiento de estas medidas, algo que ha puesto en alerta a los grupos ecologistas, que temen que la directiva termine por no cumplir su cometido.
Por su parte, la Comisión Europea ha reiterado su disposición a negociar, aunque queda por ver dónde establecerá sus líneas rojas.
Para sacar adelante la directiva antes de junio, es necesario obtener también la luz verde del Parlamento Europeo de una manera ágil, algo que no está asegurado dada la división de los miembros de la Eurocámara.
Fuentes diplomáticas señalaron que el Consejo y la CE esperan lograr un acuerdo en primera lectura con el Parlamento, la opción más rápida, aunque un sector de los eurodiputados prefieren esperar a debatir antes el texto en el pleno, tras el voto en la Comisión responsable de Energía de la Eurocámara previsto para el próximo día 28.
Otros dos puntos destacados en la agenda de mañana lo ocupan las mejoras de las infraestructuras energéticas europeas, que permitan una mejor conexión entre los Veintisiete, y la estrategia europea hasta 2020 en materia de energía.
La reunión de mañana tratará además otros temas, como los recientes cortes del gas proveniente de Rusia a la Unión Europea o el impacto en el mercado del bloqueo a las importaciones de crudo de Irán, puntos meramente informativos sobre los que no habrá debate.