Turquía empezó a recibir los primeros componentes de los sistemas antimisiles rusos S-400, anunció el Ministerio de Defensa de Turquía, Hulusi Akar.

El S-400 es uno de los sistemas móviles de defensa antiaérea más sofisticados: los cuatro tipos de misiles que posee permiten neutralizar objetivos situados hasta a 400 kilómetros (km) de distancia y a cualquier altitud inferior a 30 kilómetros.

De acuerdo con el Diario El País, la entrega de las partes a la base aérea Mürted, ubicada cerca de Ankara, se efectúa en el  marco del contrato firmado entre ambas naciones.

Según el ministro turco de Defensa, las entregas de los componentes iniciales llegaron en tres aviones rusos y las restantes de los sistemas antimisiles se realizarán en los próximos días.

A diferencia de los sistemas de defensa occidentales, el S-400 está capacitado para derribar aeronaves militares (incluidos los cazas furtivos como el F-35), drones, bombas guiadas y misiles balísticos o de crucero; esto permite la creación de zonas de exclusión aérea.

El ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, señaló que Ankara y Moscú trabajan en estrecha cooperación en relación con el comienzo del suministro de las unidades rusas.uet.

Félix Arteaga, investigador principal de Seguridad y Defensa del Real Instituto Elcano, analiza en El País, que “Turquía quiere tener mayor independencia militar de Estados Unidos y los S-400 son mucho mejores que los -sistemas de defensa- Patriot que Washington ofrecía, que solo pueden interceptar misiles a menos de 40 kilómetros”.

Irak, Catar e incluso Arabia Saudí —principal importador de armamento estadounidense— también han mostrado su interés en adquirir los modernos sistemas de defensa rusos.

Otros aliados tradicionales rusos como Argelia, Bielorrusia o Kazajistán también han negociado con el Kremlin, aunque no han llegado a formalizar acuerdos para adquirirlos. (I)