Turquía confirmó este lunes que Hayat Boumeddiene, compañera de uno de los yihadistas responsables de los atentados de la semana pasada en París, huyó a Siria desde territorio turco el 8 de enero, pero rechazó haber cometido errores.

Tres días después de la muerte de su compañero Amedy Coulibaly, a manos de la Policía en la tienda de alimentación kósher donde había tomado rehenes, el jefe de la diplomacia turca explicó que Boumeddiene "entró en Turquía el 2 de enero, procedente de Madrid". "Hay imágenes (de ella en el aeropuerto).

A continuación, "estuvo con una persona en un hotel de Kadiköy (un barrio de la orilla asiática de Estambul). Luego pasó a Siria el 8 de enero, según demuestran sus comunicaciones telefónicas", añadió Mevlüt Cavusoglu en una entrevista a la agencia de prensa oficial Anatolia.

Boumeddiene y Coulibaly se casaron en una ceremonia religiosa pero no por lo civil, por lo que no están reconocidos como esposos por la legislación francesa.

Una fuente de seguridad turca había indicado el sábado que la joven de 26 años, buscada en Francia, había llegado a Turquía el día 2 de enero, es decir, antes de los atentados que mataron a 17 personas en París, entre ellas, 12 en el ataque contra la sede del semanario satírico Charlie Hebdo.

Sobre su paso por Madrid, el jefe de gobierno español, Mariano Rajoy, dijo el domingo en París que no podía confirmar esta información.

Según el diario progubernamental turco Yeni Safak, Boumeddiene abandonó Estambul el 4 de enero rumbo a la ciudad de Sanliurfa (sureste), próxima a la frontera con Siria. A continuación, entró en Siria por el puesto fronterizo de Akçakale, uno de los puntos de paso habituales de los extranjeros que se unen a grupos yihadistas como el Estado Islámico (EI).

Las imágenes del sistema de vigilancia del aeropuerto de Estambul, difundidas el lunes por la cadena Haber Türk, muestran a Boumeddiene con un hombre, identificado por los servicios turcos como Mehdi Sabry Belhoucine, un ciudadano francés de 23 años, según Yeni Safak.

La Policía francesa emitió una orden de búsqueda de la joven para determinar su eventual papel en el tiroteo perpetrado por Coulibaly en Montrouge (sur de París), donde murió una agente de policía el 8 de enero, así como en la toma de rehenes de la tienda de alimentación kósher, donde murieron cuatro personas, un día después.

 Falta de cooperación francesa

 El gobierno islamista conservador de Turquía, acusado por sus aliados occidentales de dejadez en la lucha contra las redes yihadistas, se defendió el lunes de haber dejado pasar a la mujer más buscada de Francia.

"Compartimos estas informaciones con Francia antes de que nos las pidieran", aseguró Cavusoglu. "Los franceses no nos dijeron nada sobre ello", subrayó su homólogo de Interior, Efkan Ala.

De visita en Alemania, el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, se preguntó si el "único error" de Turquía sería compartir frontera con Siria, al tiempo que se mostró dispuesto a "cooperar".

Algunos de sus aliados acusan a Turquía de haber apoyado a algunos de los rebeldes sirios más radicales, entre ellos, el grupo EI, quienes luchan contra el régimen sirio de Bashar al Asad, la bestia negra de Ankara.

El gobierno turco ha rechazado siempre estas acusaciones y aseguró haber reforzado sus controles en la frontera.

El jefe del ejecutivo estimó el lunes en 7.000 el número de yihadistas extranjeros, cuya estancia en Turquía tienen prohibida, y entre 1.500 y 2.000 los expulsados.

Siria aprovechó la ocasión el lunes para acusar a su vecino de colaborar con los yihadistas, que combaten contra Asad, al ser "el punto de paso principal de terroristas extranjeros que acuden a Siria y regresan", indicó una fuente de la diplomacia siria.