El presidente turco, Recep Tayyp Erdogan, abrió las puertas ayer a un ataque turco contra los terroristas del Estado Islámico (EI), en un giro en la política de Ankara en la región que venía reticente a actuar contra este grupo de yihadistas y fanáticos ultraislámicos que avanzan en suelo sirio e iraquí. “Estamos listos para cualquier tipo de cooperación contra el terrorismo”, anunció ayer en alusión a la campaña internacional de bombardeos que ya lleva adelante Estados Unidos y sus aliados.

“La lucha contra el Estado Islámico y otros terroristas y la destitución del gobierno (sirio) de Bashar (Assad) siguen siendo la prioridad de la política turca en la región”, indicó Tayyp Erdogan, según la prensa turca. El Parlamento de Turquía debatirá y previsiblemente aprobará mañana, en sesión cerrada, una ley que autorizará una intervención militar turca en Irak y Siria.