Los 'tories' destinarán $1.270 millones adicionales
Theresa May pacta con unionistas para conformar gobierno
La primera ministra británica, la conservadora Theresa May, acordó este lunes un pacto con el Partido Democrático Unionista (DUP) para conformar un Gobierno de minorías en Gran Bretaña, que le permita avanzar con las negociaciones del ‘Brexit’, pero que podría hacer tambalear a futuro su debilitado mandato.
El acuerdo, que fue alcanzado dos semanas después que las elecciones legislativas arrojaran un Parlamento sin mayoría, hará que los diez parlamentarios del DUP apoyen a los conservadores en votaciones claves en la Cámara de los Comunes.
Bajo el pacto, los ‘tories’ prometieron destinar 1.000 millones de libras esterlinas (1.270 millones de dólares) adicionales para Irlanda del Norte en los próximos dos años, sumados a otros 636 millones de dólares ya anunciados previamente.
La jefa del DUP, Arlene Foster, afirmó este lunes que el pacto “de amplio alcance” es bueno para Irlanda del Norte y para todo el Reino Unido.
El Gobierno dio a conocer un documento de tres páginas en el que detalló los términos y prioridades de dicho acuerdo.
Según la nota, el pacto político entre conservadores y unionistas durará el resto del mandato gubernamental, hasta 2022, aunque será revisado en dos años.
Londres prometió que los 1.500 millones de libras destinados a Irlanda del Norte servirán para financiar proyectos de infraestructura en esa región, incluyendo proyectos para el sector de salud, educación y redes viales.
Como parte del acuerdo, el Gobierno priorizará el bienestar de los veteranos del Ejército en Irlanda del Norte, mantendrá los regímenes de pensión estatales y los subsidios para calefaccionar viviendas en invierno.
Ambos partidos se comprometieron a mantener el gasto de Defensa para la OTAN en un 2% del PIB británico, continuar con incentivos de dinero a granjeros, apoyar los compromisos del Acuerdo del Viernes Santo (1998), y rechazar cualquier tasa fronteriza entre ambas Irlandas sin el consentimiento de la población.
A cambio, el DUP apoyará a los conservadores en las leyes sobre el ‘Brexit’ y también de seguridad.
Tras acordado el pacto, May y Foster se dieron la mano en la oficina gubernamental de Downing Street, en Londres, en tanto que el jefe de la bancada conservadora Gavin Williamson, y su colega del DUP, Jeffrey Donaldson, firmaron los documentos correspondientes.
Fuera de la residencia oficial de May, Foster dijo que el acuerdo “llevará estabilidad al Gobierno británico, cuando se embarca en el proceso del ‘Brexit’”.
“Este acuerdo servirá para llevar un Gobierno estable en el interés nacional del Reino Unido durante este momento clave”, agregó la funcionaria unionista.
Foster agradeció la financiación adicional a Irlanda del Norte, que dijo beneficiará “a todas las comunidades”, nacionalistas y unionistas.
Por su parte, May consideró que el pato “es muy bueno” para todo el Reino Unido. “Compartimos muchos valores en cuanto a que queremos ver la prosperidad en toda Gran Bretaña, el valor de la unión, el vínculo importante entre las diferentes partes del Reino Unido. Queremos en gran medida que esto sea protegido y fortalecido”, subrayó la mandataria conservadora.
Bajo el llamado acuerdo “de confianza y provisión”, el DUP apoyará al Gobierno en votaciones claves, incluidas las del programa legislativo y del presupuesto. También apoyará a May en las legislaciones por el ‘Brexit’, que dominarán gran parte del próximo período legislativo en el Parlamento.
En otros proyectos legislativos el DUP no ofreció su apoyo incondicional, algo que podría poner en serios problemas al Gobierno en caso que la oposición laborista decida rechazar propuestas de ley claves.
Tras las elecciones generales del 8 de mayo, May perdió la mayoría de 17 bancas en la Cámara de los Comunes, que obliga a los conservadores a contar con el apoyo de otros partidos para la aprobación de leyes, entre ellas las relacionadas con la salida de la Unión Europea (UE).
Varios políticos conservadores habían aconsejado a la Primera Ministra gobernar sin acuerdo alguno con el DUP, al considerar que los unionistas no estarán preparados para pedir la remoción de May y podrían llevar a que se convoquen a nuevas elecciones, teniendo en cuenta la creciente oposición del jefe del Laborismo, Jeremy Corbyn, y de un gran número de sus parlamentarios, al mandato de la jefa del Gobierno.
Al respecto, el ex primer ministro conservador John Major advirtió que el pacto con el DUP podría incluso poner en peligro el Gobierno entre nacionalistas y unionistas en Irlanda del Norte, mientras que otros legisladores oficialistas indicaron que la oposición del DUP al aborto y a los matrimonios entre homosexuales podría dañar gravemente las perspectivas políticas a futuro de los “tories”.
Por su parte, el ministro principal de Gales, Carwyn Jones, acusó a May de “arrojar dinero a Irlanda del Norte mientras ignora el resto del Reino Unido".
“El acuerdo de este lunes es una acción directa para mantener a una debilitada primera ministra y a un tambaleante gobierno en el poder”, concluyó el funcionario galés. (I)