Guardias y empleadas de una prisión fueron despedidas por tener relaciones con reclusos
En Gran Bretaña, 18 mujeres, entre guardias y empleadas, fueron despedidas o renunciaron a sus cargos tras descubrirse que mantenían relaciones sexuales con reclusos de la prisión donde laboraban.
Esto ocurrió en HMP Berwyn, la prisión masculina más grande del Reino Unido, e incluso provocó que tres mujeres enfrenten penas de cárcel por este tipo de actos.
Según información de los medios BBC y Mirror, la primera guardia procesada fue Jennifer Gavan, de 27 años. A ella se la declaró culpable de mala conducta por aceptar unos USD 150 para pasarle un celular a al recluso Alex Coxon para luego intercambiar imágenes subidas de tono.
Otras extrabajadora de ese centro de detención que fue condenada a prisión fue Emily Watson, de 26 años. Ella fue encarcelada por mantener una relación con traficante de drogas condenado a ocho años de prisión.
Otro de los casos fue el de Ayshea Gunn, de 27 años, quien mantuvo una relación con un reo condenado a 12 años por conspirar para robar. Entre las pertenencias de la mujer se encontró una fotografía de ella con el prisionero.
Según el presidente de la Asociación de Funcionarios de Prisiones todos estos casos son consecuencia de contratar a mujeres con poca experiencia y que son susceptibles de ser condicionadas por los presos.
Por lo que el Servicio de Prisiones de SM informó a la BBC que mejoraría la formación y erradicaría a los guardias “que socavan nuestro servicio ejemplar”.
Según estadísticas publicadas por el medio Mirror, desde 2019, 31 funcionarias en Inglaterra y Gales han sido despedidas por interacciones inapropiadas.