Talibanes atacan a la OTAN y a la Embajada de EE.UU.
Talibanes suicidas y fuertemente armados lanzaron ayer un ataque coordinado en Kabul contra el cuartel general de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) y la Embajada de Estados Unidos, ubicadas en la zona verde, un fortín en el que se desarrolla la actividad diplomática en Afganistán.
El comando de insurgentes asaltó el centro de la capital, disparando con rifles y lanzando misiles. Siete personas murieron y 23 resultaron heridas.
La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, aseguró ayer que Estados Unidos no se dejará “intimidar por el cobarde ataque” con lanzacohetes y armas livianas que tuvo lugar en proximidades de la Embajada estadounidense.
“Permaneceremos vigilantes, pero vamos a continuar trabajando en ese país con un compromiso aún más fuerte”, señaló la jefa de la diplomacia estadounidense. Subrayó, además, que ningún funcionario de la Embajada resultó herido.
Cinco horas después de que comenzara el ataque en el centro de la ciudad, los combates continuaron en la noche entre las fuerzas de seguridad afganas y los asaltantes armados con lanzacohetes y fusiles.
El Gobierno afgano confirmó que habían muerto cuatro civiles y tres policías, así como por lo menos seis insurgentes.
Dos de los atacantes, armados con lanzacohetes y fusiles de asalto, resistieron atrincherados en un edificio de diez pisos en construcción en el centro de la capital afgana, situado cerca de la entrada del cuartel general de los servicios afganos de inteligencia (NDS) y desde el que se domina el vasto