El príncipe heredero Maha Vajiralongkorn (foto) fue proclamado oficialmente rey de Tailandia ayer, tras una declaración leída y retransmitida por las cadenas de la televisión tailandesas, más de un mes después de la muerte de su padre, Bhumibol.

“Respondí favorablemente a los deseos del difunto rey por el bien de toda la población tailandesa”, declaró el monarca tras una audiencia con el presidente del Parlamento.

El príncipe, de 64 años, causó sorpresa al solicitar, horas después del deceso de su padre, el 13 de octubre, un plazo antes de acceder al trono.

El nuevo rey  será formalmente coronado, con el nombre de Rama X, en una ceremonia tras la incineración de los restos de su padre en octubre de 2017.

El príncipe pasaba hasta ahora la mayor parte del tiempo en Alemania. Su personalidad, al parecer imprevisible, es objeto de debate incluso entre consejeros de palacio y generales al mando del gobierno, según analistas.

Su imagen contrasta con la de su padre. El difunto monarca, que reinó 70 años, era considerado el ‘padre de la nación’ por los tailandeses, que lo veneraban. Su figura fue forjada durante décadas de propaganda, apoyada por una ley estricta contra los delitos de lesa majestad. (I)