Socialistas lusos piden sancionar a países de la UE si no fomentan el consumo
El líder de los socialistas portugueses, António José Seguro, propuso este lunes sancionar a los países de la Unión Europea (UE) con excedentes financieros en sus cuentas que no adopten medidas para fomentar el consumo y dinamizar la economía.
El secretario general del Partido Socialista (PS) luso afirmó que países como Portugal necesitan que aquellos socios comunitarios que mejor han resistido la crisis incrementen su consumo interno para poder revitalizar su sector exportador.
En una conferencia celebrada en Lisboa y organizada por el periódico "Diário Económico", Seguro criticó el "egoísmo" de algunas de las políticas seguidas por Bruselas y volvió a mostrar su apoyo a un Banco Central Europeo (BCE) con más competencias.
"Es tan importante exigir consolidación a los países que tienen desequilibrios en sus finanzas como exigir a los que tienen excedentes en sus cuentas públicas que destinen ese dinero a dinamizar el consumo interno, y por esa vía, ayudar a estimular el sector exportador de países como Portugal", subrayó el líder del PS.
En su opinión, la situación que vive la UE no se puede resolver únicamente "a costa del sacrificio de las personas", sino que también hace falta dinamizar la economía.
"El BCE es el único banco central del mundo que no puede emitir moneda. Estoy en contra de la idea de imprimir moneda sin límite, pero el precio a pagar por un poco más de inflación es mucho menor que los efectos de las actuales políticas recesivas", incidió.
Seguro, que sustituyó al ex primer ministro portugués José Sócrates (2005-2011) al frente del Partido Socialista este verano después de su derrota en las elecciones generales de junio pasado, también lanzó duras críticas al actual Gobierno conservador luso por su política de recortes.
Ante un auditorio plagado de representantes del sector empresarial, Seguro lamentó la decisión del Ejecutivo de suprimir entre una y dos pagas extra a trabajadores públicos y pensionistas que cobren más de 600 euros mensuales, pese a contar con un excedente presupuestario de más de 2.000 millones de euros.
Este excedente se produce gracias al acuerdo alcanzado entre el Gobierno luso y la banca para transferir a la Seguridad Social fondos de pensiones por valor de 6.000 millones de euros, lo que le permitirá cumplir este año sus objetivos de reducción del déficit publico, hasta el 5,9 por ciento del PIB en 2011.
A cambio de recibir estos fondos de pensiones, el Ejecutivo pactó con la banca destinar entre 2.000 y 3.000 millones de euros a las diferentes administraciones públicas para que resuelvan sus deudas con las entidades financieras.
El primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, admitió este fin de semana que existe este excedente, lo que permitirá a Portugal cerrar el ejercicio 2011 con un nivel de déficit "sustancialmente" inferior al acordado.
Para Seguro, la transferencia de estos fondos de pensiones al Estado debería servir para reducir el déficit como se prometió, evitar la supresión de pagas extra y saldar las deudas del Estado, en ese orden.
"El futuro me dará la razón, existe un margen presupuestario suficiente para las tres opciones", recalcó.
La eliminación de pagas en el sector público es una de las medidas más controvertidas de los Presupuestos Generales para 2012, aprobados el pasado miércoles por el Parlamento luso con los votos a favor de los dos partidos en el Gobierno (el PSD y los democristianos del CDS-PP, que cuentan con mayoría absoluta), la abstención del PS y el rechazo de los grupos de izquierda.