La colombiana Shakira levantó las alarmas este fin de semana al llegar a España junto a sus dos hijos: Sasha y Milan. Los niños pasarán unos días con su padre, el futbolista Gerard Piqué. Sin embargo, se especuló que la barranquillera tuvo otras motivaciones para su viaje. 

Una de ellas fue ver en acción a su presunto amor, el corredor de Fórmula 1 Lewis Hamilton. De hecho, ella estuvo en el Gran Premio de España y disfrutó de la carrera que dejó en el podio a Verstappen, Hamilton y Russell. 

No obstante, la cantante aprovechó su viaje para reunirse con sus abogados y preparar el juicio que la enfrentará a Hacienda, en noviembre de 2023. Ella está acusada de un fraude fiscal de 14,5 millones de euros (USD 15,4 millones). 

Si resultara culpable podría enfrentar una pena de prisión de ocho años y dos meses; más una cuantiosa multa de más de USD 24 millones. 

El caso aún se complica más, ya que la autora de ‘Te Felicito’ no llegó a un acuerdo con la Fiscalía, por lo que espera mostrar su inocencia. Su defensa está encabezada por Pau Molins, quien ya prepara su estrategia. 

Dentro del caso también se ha conocido que Hacienda ha renunciado a 51 testigos de más de 140 que propuso para el juicio. En su mayoría se trataba de conocidos y vecinos de Shakira que vivían cerca de ella en su casa de Esplugues de Llobregat, en Barcelona. 

José Manuel del Amo, magistrado, fue el encargado de decir a los abogados de la defensa y contraparte que revisen el listado de testigos para ver si todos eran necesarios. Con ello se redujo el número de personas que se presentarán a 51.