El gobierno venezolano arrecia  medidas en la generación y ahorro de energía eléctrica frente a una prolongada sequía, el principal embate climatológico que enfrenta el país asociado al fenómeno de El Niño.

El viceministro para el desarrollo de la Industria Eléctrica, Freddy Brito, precisó que una campaña informativa y forjadora de conciencia en este renglón- dirigida a las comunidades fundamentalmente- y frecuentes encuentros con representantes de entidades turísticas y comerciales, sobresalen entre las iniciativas con mayores dividendos.

Precisó que en el caso de los empresarios hoteleros y la red de comercio, este tipo de debate que encabeza el ministro para la Energía Eléctrica, Luis Motta, permitió reducir en lo que va de año un cinco por ciento del consumo habitual en esos espacios y trabajar por la autogeneración.

Brito añadió que también el ministro Motta creó desde principio de este año un Estado Mayor Eléctrico, que funciona las 24 horas del día, para revisar indicadores como la demanda, el descenso de los niveles de agua potable en el embalse Guri (estado de Bolívar) y el aporte del río Caroní, el comportamiento del suministro del vital líquido y la generación termoeléctrica

Explicó que en la cruzada es clave el reemplazo paulatino de equipos ineficientes de aire acondicionado, que en el caso del sector residencial representa el 32% del consumo.

Agregó que otro de los programas es la sustitución de unos tres millones de bombillos incandescentes por ahorradores, lo que hasta este mes de marzo permitió reducir unos 150 megavatios.

Todos esos planes, según comentó, están dirigidos a garantizar una mejor calidad de vida de la población en medio de una situación compleja, en particular por la escasez de precipitaciones que inciden en la disminución de los niveles históricos de los embalses de agua potable.

En la actualidad se registra un descenso de las lluvias de un 30% en relación a períodos normales, reveló.

La situación en Venezuela, dijo, aunque la tenemos bajo control y hay otras opciones hacia los meses de abril y mayo, debemos estar muy atentos a las consecuencias que para el clima y el medio ambiente tendría el calentamiento global, que también afecta a otras naciones de la región como Colombia.

Resaltó además que ante similar situación, mientras en otros países se adoptan medidas como la paralización de centrales hidroeléctricas, o pretenden elevar las tarifas por este servicio, en Venezuela vamos a la conciencia del ciudadano y a optimizar la generación, porque la variación climática o la sequía no la propician el Gobierno, son situaciones que debemos encarar todos.

El seguimiento a estos y otros indicadores, como la disminución en los niveles del embalse Guri nos permiten tener la confianza de que no vamos a tener que paralizar centrales termoeléctricas o llegar a administrar la carga en el Sistema Eléctrico Nacional, entre nuevas medidas que perturbarían a la población.

El funcionario destacó como otra de las iniciativas para el ahorro de electricidad y agua el más reciente decreto del presidente de la República, Nicolás Maduro, que fijó feriados todos los días de la Semana Santa, tanto para el sector público como el privado.

Acerca del aporte del sector eléctrico a la Agenda Económica Bolivariana que impulsa el Ejecutivo para enfrentar un cambio de modelo rentista petrolero por uno socioproductivo, Brito subrayó que la sustitución de importaciones es una de esas estrategias en el eje industrial.

Al respecto mencionó que desde el mismo Plan de la Patria ( 2013-2019 ) se trabaja de manera intensa por la producción nacional de elementos vitales como trasformadores de distribución, líneas de trasmisión, aisladores y fusibles, entre otros insumos.

Finalmente, precisó que junto a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y los consejos comunales está activado un sistema de vigilancia para enfrentar acciones de sabotaje a las estaciones eléctricas como parte de planes desestabilizadores de la derecha. (I)