El Gobierno conservador y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), la mayor formación en la oposición, acordaron modificar la legislación sobre los desahucios de viviendas por impago de hipoteca y el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, avanzó que espera poder concretar hoy medidas, como “la paralización temporal de los desahucios” a familias vulnerables.

En ese marco, representantes de ambas partes se reunirán hoy para intentar definir medidas urgentes en una clara reacción al suicidio de una mujer en el norte de España que iba a ser desahuciada.

La crisis económica, a la que contribuyó la “burbuja inmobiliaria” y cuyas dimensiones se reflejan en el elevado índice de desempleo en España, un 25 % de la población activa, ha dejado a muchas familias expuestas a la quiebra y a la pérdida de su vivienda.

Según datos oficiales, desde que comenzó la crisis económica en 2007, unas 400.000 familias han perdido sus viviendas por no poder pagar la hipoteca, deuda que tienen la obligación de seguir pagando porque la legislación española no contempla la dación.

La desesperación por perder su hogar ha motivado a que una mujer española, de 44 años, haya puesto a la venta todos sus órganos no vitales para poder pagar una vivienda y mantener a su hija, en una entrevista divulgada este domingo.

“Comencé vendiendo un riñón, ahora ya no vendo solo un riñón, vendo también las córneas, vendo también uno de los pulmones, vendo también un pedazo del hígado, vendo cualquier órgano de mi cuerpo que alguien pueda comprar y lo vendo por pura desesperación”, afirma la mujer, cuya identidad no se divulgó, en una entrevista difundida por el diario El Mundo.
“Tengo un preaviso de orden de desahucio para mi hija y para mí, no tenemos familia, no tenemos adónde ir”, afirmó la ciudadana española.