El publicista del presidente Michel Temer reveló que el presidente del grupo empresarial JBS le pagó una campaña de marketing en las redes sociales para "derrocar" a la presidenta Dilma Rousseff y así permitir el ascenso de su vicepresidente, el actual mandatario, hoy contra las cuerdas por gravísimas acusaciones de corrupción.

De esta forma, crecen las pruebas y testimonios de que el juicio político contra Rousseff fue financiado por las patronales empresariales alineadas con Temer, que financiaron a los diputados y senadores que destituyeron a la mandataria del Partido de los Trabajadores el año pasado.

Elsinho Mouco, el publicista de campaña de Temer desde hace 15 años, confirmó al diario O Estado de Sao Paulo, que recibió unos 100.000 dólares de Joesley Batista, dueño del grupo JBS, hoy delator y colaborador de la justicia.

"Vamos a derribar a esa mujer", le dijo Batista a Mouco en mayo de 2016. Y le dio 300.000 reales, casi 100.000 dólares, en efectivo, según reveló el propio publicista.

Batista es el empresario que grabó a Temer, a quien dijo financiar desde 2010 con desembolsos anuales ilegales para el Partido del Movimiento de la Democracia Brasileña.

La revelación del publicista coincide con la delación de Batista ante la fiscalía. Según Batista, Temer le pidió financiar un proyecto para mejorar su imagen en las redes sociales.

Entonces fue la vez en queTemer envió a Mouco a la residencia de Batista en la ciudad de Sao Paulo, según narró el publicista a O Estado. "Él me llamó y para mi sorpresa comenzó a llamar a Dilma de ingrata, grosera e incompetente. Tenemos que sacarla, me dijo", relató el publicista.

En su delación, Batista señaló que aportó sobornos por 10 millones de dólares para elegir como presidente de la Cámara de Diputados en 2015 a Eduardo Cunha, cerebro de la caída de Rousseff y mantenido hasta marzo por Batista.

La revelación del publicista se conoce un día después de la detención del exasesor de Temer Rodrigo Rocha Loures, filmado tras recibir una maleta con 500.000 reales, supuestamente a pedido de Temer en la convfersación grabada por el empresario de JBS, el mayor frigorífico del mundo.

El fiscal general, Rodrigo Janot, según la prensa local, prepara una denuncia formal contra Temer, por ahora investigado por el Supremo Tribunal Federal por corrupción, obstrucción de la justicia y lavado de dinero.

Batista y el grupo JBS delataron el pago legal e ilegal de más de 1.800 campañas políticas, pero la grabación contra Temer y el senador suspendido Aecio Neves pusieron al presidente en una crisis que parece sin retorno.

Temer deberá someterse esta semana al Tribunal Superior Electoral, que puede destituirlo en caso de que sea culpable de irregularidades en su cuenta de campaña. El diario O Globo, que reclama la renuncia del mandatario para que continúe el ajuste económico que depende del Congreso, informó hoy que Temer dijo que para sacarlo del gobierno "tendrán que matarme", supuestamente en una charla con el jefe del Senado, Eunicio Oliveira.

El PT de Rousseff y del expresidente Luiz Lula da Silva eligió en Brasilia, luego del Sexto Congreso Nacional del partido, como jefa de la fuerza política a Gleisi Hoffman, senadora por el estado de Paraná, de cara a la preparación para las elecciones de 2018.

El PT y la mayoría de la población, según las encuestas, apoyan la realización de elecciones directas, pero para ello se debería modificar la Constitución. Los aliados de Temer buscan, en caso de renuncia, cumplir el rito constitucional para que el Congreso elija a un sucesor.

Según los sondeos de Datafolha, entre los parlamentarios el nombre con más consenso es el titular de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, del partido derechista Demócratas, hoy número dos del país.

Miles de personas se manifestaron este domingo en el Largo da Batata, en Sao Paulo, durante un show musical convocado para pedir elecciones "Directas Yá". (I)