Prisión provisional para el pederasta indultado en Marruecos
Un juez de la Audiencia Nacional española dictó este martes prisión provisional para el pederasta Daniel Galván, detenido ayer tras ser revocado su indulto en Marruecos. Mientras tanto se decide si cabe o no su extradición.
Galván, aprehendido la víspera en Murcia, declaró durante cerca de una hora y media ante el juez Fernando Andreu, que determinó su entrada en prisión ante el riesgo de fuga y la gravedad de la pena impuesta (30 años de cárcel).
"(Carece) en España de un mínimo arraigo familiar, social, económico, laboral o de otro tipo que neutralice la tentación de ponerse fuera del alcance del aparato judicial penal en caso de ser puesto en libertad", dijo el auto del magistrado.
Galván nació en Irak, adquirió la nacionalidad española al casarse con una mujer de la que ahora está divorciado y ha residido la mayoría de su vida en Irak y España, aunque también lo ha hecho en Egipto, Siria, Jordania, Reino Unido y Marruecos, según el auto, que menciona su propia declaración.
El preso, cuyo abogado pidió la libertad, estaba cumpliendo en Marruecos una condena de 30 años por violar y grabar al menos a 11 niños de entre 4 y 15 años cuando la semana pasada fue indultado junto con otros 47 presos españoles por el rey de Marruecos, Mohamed VI.
El monarca marroquí decidió retirar la medida de gracia al tener en cuenta la gravedad de los delitos y después de que cientos de personas se manifestaran el viernes pasado ante el Parlamento marroquí para protestar por la decisión.
Las circunstancias en que se produjo el indulto y su posterior anulación deberán ser analizadas una vez tenga entrada toda la documentación extradicional, para lo que Marruecos cuenta con un plazo de cuarenta días.
Una vez llegue esa documentación, el juez previsiblemente la enviará a la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional para que estudie la petición de entrega de las autoridades marroquíes.