El nuevo presidente electo de Kenia, Uhuru Kenyatta, imputado por la Corte Penal Internacional (CPI) por supuestos crímenes contra la humanidad, aseguró ayer que cooperará con los organismos internacionales.

“Reconocemos y aceptamos nuestras obligaciones internacionales y cooperaremos con las instituciones internacionales”, indicó Kenyatta, en un discurso pronunciado horas después de confirmarse oficialmente su triunfo en las elecciones presidenciales del pasado lunes.

Sin embargo, “también esperamos que la comunidad internacional respete la voluntad soberana del pueblo de Kenia”, apostilló el vencedor de los comicios, al subrayar que Kenia es parte de la comunidad internacional.

Kenyatta, que será el cuarto presidente keniano, está acusado de ser uno de los instigadores de la violencia postelectoral que azotó el país tras los comicios de diciembre de 2007, que dejaron 1.300 muertos y 600.000 desplazados.

En el discurso, el presidente electo dijo que los comicios fueron “las elecciones generales más libres y más justas de la historia de Kenia”.