La fuga desde el martes de un exmiembro de ETA, Alberto Plazaola, que debía reingresar a prisión tras una sentencia del Tribunal Supremo español en contra de su liberación, ha provocado una polémica por la tardanza de la transmisión a la policía de la decisión judicial.

"Le siguen buscando", declaró a la AFP una fuente judicial este jueves.

Plazaola, detenido en España desde 1996 tras cumplir siete años de prisión en Francia, fue liberado en diciembre pero tenía que volver a la cárcel debido a la sentencia del Supremo.

Su fuga pudo producirse entre el momento en que se publicó la sentencia en la prensa el martes a mediodía y la llegada de la policía, un periodo de varias horas durante las que una multitud de manifestantes de la izquierda independentista abertzale se movilizaron frente a su casa en Oñate (País Vasco).

Esta huida generó un durísimo editorial del periódico de centro-derecha El Mundo, que denunció un "escándalo social" y "la falta de coordinación" entre policía y justicia.

"Es difícil mantener la decisión reservada. Se ha enterado que le quedaban once años por cumplir antes que la policía. Pero la policía no puede vigilar a una persona en una situación de libertad definitiva", respondió una fuente judicial.

Un comunicado del ministerio del Interior precisó este jueves que la noticia fue difundida a las 12:56 (07:56 de Ecuador) del martes, pero "no es hasta las 17:22 cuando se recibe el auto ordenando la detención", y "a las 20h44 se recibe el auto que autoriza la entrada y registro en el domicilio, para llevar a cabo la detención", pero para proceder a esto hace falta la presencia de la secretaria judicial de Bergara que no llegó hasta las 23:05.

El Tribunal Supremo ha decidido también abrir una investigación interna, según su servicio de prensa.

Tras la fuga, se emitió una orden de búsqueda y captura nacional, que pronto podría ser internacional, contra el exetarra, condenado por intentos de asesinato.

La prensa especuló con la posibilidad de una huida hacia Francia o incluso Venezuela, donde vivirían otras antiguos miembros del grupo armado independentista vasco.

La Audiencia Nacional (principal instancia penal española) decidió liberar a Plazaola tras contabilizar en su pena los años de prisión cumplidos en Francia, donde había sido condenado por asociación de malhechores vinculada con organización terrorista.

La Audiencia Nacional se basó en una decisión marco europea imponiendo a los Estados miembros tener en cuenta las decisiones de la justicia extranjera en el cómputo de las penas.

Pero esta interpretación de la decisión europea, que también se aplicó para otros exmiembros de ETA, no generó unanimidad en España y fue denunciada por asociaciones de víctimas y también por la fiscalía.

Con este son tres los autos del Supremo que anulan decisiones de la Audiencia Nacional sobre antiguos miembros de ETA, cuyos atentados han provocado en total 828 víctimas, según el ministerio del Interior.

La organización renunció definitivamente a la violencia en octubre de 2011.