El  Partido Socialista Obrero Español (PSOE) revela las bases sobre las que pretende negociar con el resto de formaciones para intentar recabar los apoyos necesarios para investir como presidente de España a Pedro Sánchez.

El documento, que ya ha sido entregado a todos los partidos del arco parlamentario, consta de 7 ejes fundamentales, entre los que destacan el compromiso para relanzar políticas activas que sirvan para reducir la alta tasa de desempleo y la desigualdad social; y su deseo por alcanzar un pacto de Estado para poner en marcha un modelo educativo público consensuado y otro acuerdo de gran calado destinado a adaptar la Constitución de 1978 al siglo XXI.

La propuesta socialista también hace referencia a la aprobación de nuevas herramientas que sirvan para mejorar la lucha contra la corrupción que asola el país y la necesidad de potenciar la política exterior española, un tanto desprestigiada en los últimos años.

Aunque la apariencia inicial de este extenso documento que los socialistas hicieron público ayer es una ‘apuesta social’ para acercar posturas con los partidos de izquierda que reclaman un gobierno de ‘cambio y progreso’, la realidad no parece tan concluyente.

“Podemos exige garantías de que el PSOE cumplirá su palabra, ya que su currículum político está repleto de promesas que más tarde olvidaron”, explica a este diario una fuente del equipo negociador de la formación de Pablo Iglesias. La número 3 del partido, Carolina Bescansa, ratificó horas después: “Podemos tiene las puertas abiertas a negociar un pacto con los socialistas para toda la legislatura y eso es inviable alcanzar si lo apoya Ciudadanos, cuyo programa económico es igual al del PP”.

Bescansa enfatizó que su formación no veta la presencia del marco neoliberal que encabeza Albert Rivera, “pero el PSOE debe elegir entre dos opciones antagónicas en lo económico”.

También la coalición izquierdista Unidad Popular de Alberto Garzón mostró algunas reservas sobre varios aspectos de la propuesta socialista. En concreto, Garzón se refirió ayer a las imprecisiones que presentan algunos de los puntos fundamentales y a la ausencia de medidas para derogar la ley laboral en vigor o el cumplimiento del déficit exigido por la UE que consideran incompatible con el gasto público.

El último movimiento de los socialistas es haber logrado que el PP, finalmente, acepte acudir a una reunión al más alto nivel. Según indicaron dirigentes conservadores, Mariano Rajoy y Pedro Sánchez se encontrarán mañana a una hora y en un lugar por confirmar. Algunas fuentes consideran que puede tratarse del último intento de forzar lo que ya se conoce como ‘la gran coalición’, un pacto entre los dos principales partidos españoles para neutralizar cualquier posibilidad de gobierno de izquierda. Hay incluso quien sospecha que el PP estudia ya la posibilidad de entregar la presidencia a Pedro Sánchez. Pero, por el momento, solo se trata de rumores sin confirmar. (I)

DATOS

De los 7 ejes del texto, el primero se centra en un cambio de la política económica y en la creación de empleo, para lo que propone derogar la reforma laboral aprobada por el PP para reducir a tres los tipos de contratos: indefinido, temporal y de formación.

También plantea derogar la actual ley educativa, fortalecer la lucha contra la corrupción y revisar la ley electoral.

Propone un plan de emergencia social que incluya la aprobación del ingreso mínimo vital para las familias con menos recursos.

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Gobierno responsabiliza a Alcaldesa

Titiriteros presos por "enaltecer el terrorismo"

El caso de los dos titiriteros que un juez de la Audiencia Nacional envió a prisión sin fianza el viernes por “enaltecer el terrorismo” durante un acto infantil del carnaval madrileño ha eclipsado las complejas negociaciones para la formación de un gobierno en España. Y no es de extrañar porque todo está envuelto en la confusión.

Según ha podido saber EL TELÉGRAFO, los dos jóvenes artistas callejeros fueron contratados por el Ayuntamiento de Madrid para representar con marionetas la adaptación de una obra de Federico García Lorca sobre la injusticia y la discriminación social desde un punto de vista humorístico para ser entendido por un público infantil.

Pero en la adaptación que presentaron, los artistas decidieron introducir en la representación un cartel para ‘justificar el castigo’ que el villano de la obra infligía a la víctima. En el rótulo colgado sobre el cuello del títere podía leerse ‘Gora Alka-eta’, un incomprensible juego de palabras que algunos interpretaron como una exaltación de Al Qaeda y de la organización terrorista ETA.

Los responsables fueron detenidos y, tras prestar declaración ante el juez y expolicía franquista Ismael Moreno, ingresaron en prisión incondicional.

El gobernante Partido Popular (PP) se ha lanzado a la yugular de la alcaldesa de la capital, Manuela Carmena, y ha denunciado a su responsable de Cultura, Celia Mayer, por “colaboración en el enaltecimiento del terrorismo” y “desprotección de menores”. (I)