Pobreza afecta a casi 81 millones de niños en América Latina y el Caribe
La pobreza infantil afecta a casi 81 millones de menores de 18 años en Latinoamérica y el Caribe, según un estudio de la Cepal y la Unicef, que, además, hacen un llamado a los Gobiernos a invertir en la infancia y reducir las persistentes desigualdades.
Según la investigación de la Comisión Económica de América Latina y el Caribe (Cepal) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), existe una gran heterogeneidad entre países como Bolivia, El Salvador, Guatemala, Honduras y Perú, donde más de 2/3 de los niños son pobres.
Por el contrario, en Chile, Costa Rica y Uruguay menos de uno de cada cuatro niños sufre pobreza infantil, precisan los datos contenidos en el estudio "Pobreza infantil en América Latina y el Caribe".
En la investigación de ambos organismos internacionales se desarrolla una medición y diagnóstico de la pobreza infantil, desde un enfoque de derechos en la región y busca proponer recomendaciones de política pública para su superación.
El estudio, realizado entre 2008-2009, midió múltiples dimensiones de la pobreza infantil en América Latina y el Caribe, vinculando cada una al cumplimiento de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, que entró en vigencia en 1989.
El sondeo tomó en cuenta factores como la nutrición, acceso a agua potable, conexión a servicios de saneamiento, la calidad de la vivienda y el número de personas por habitación, asistencia a la escuela y acceso a medios de comunicación e información, cuya privación contribuye a un cuadro de pobreza y exclusión social.
Según el estudio, la única manera de eliminar el flagelo de la pobreza infantil es que los Gobiernos integren políticas sociales, de empleo y macroeconómicas.
"Esto requiere asignar mayores recursos para promover los derechos de la infancia, asegurar un entorno protector, aumentar la provisión y la calidad de los servicios, como también ampliar los sistemas de protección social", afirmaron Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, y Bernt Aasen, director regional de Unicef para América Latina y el Caribe, en el prólogo del documento.