En las séptimas elecciones, desde el retorno a la democracia en Chile, el expresidente de centroderecha Sebastián Piñera se impuso ayer con el  36,63% de los votos, seguido por el senador de centroizquierda, Alejandro Guillier, quien lograba un 22,66% según el 95,49% de las mesas escrutadas.

Sin embargo, de confirmarse la tendencia, ambos disputarán la Presidencia en una segunda vuelta el próximo 17 de diciembre.
Lo que no previeron las encuestadoras es que Piñera obtuvo mucho menos de lo esperado. Los sondeos le daban en principio un 44% de intención de voto; incluso sus partidarios pensaban que no sería necesario un balotaje.

Además, las encuestas se equivocaron en un factor que será clave para el balotaje: en tercer lugar quedó Beatriz Sánchez, la candidata del Frente Amplio -un nuevo conglomerado de izquierda liderado por jóvenes diputados que en su momento fueron dirigentes estudiantiles- que lograba un 20,4%. Un resultado inesperado, ya que los sondeos le daban un 13% de intención de voto.

Otra sorpresa de la jornada fue que el diputado de ultraderecha José Antonio Kast lograba un 7,9%, el doble de lo calculado. En quinto lugar quedó la candidata de la Democracia Cristiana, Carolina Goic, con un 5,88%, sexto el exdiputado de centroizquierda, Marco Enríquez-Ominami (5,68%); más atrás el exprofesor ultraizquierdista Eduardo Artés (0,5%) y en último lugar el senador centroizquierdista Alejandro Navarro (0,3%).

Lo más llamativo es que ahora la segunda vuelta queda abierta. Es decir, el favoritismo de Piñera podría esfumarse, ya que Guillier tiene posibilidades de vencerlo, según la tendencia.

Por eso, los votos de Beatriz Sánchez, Carolina Goic y Marco Enríquez-Ominami serán determinantes camino al balotaje.

A su vez, el expresidente podría verse beneficiado por los votantes de Kast. En cualquier caso, la segunda vuelta estará muy disputada.

La sorpresa es porque todos esperaban que Piñera arrasara y no fue así. Pero lo realmente clave es que los votos de Beatriz Sánchez serán sumamente importantes para Guillier. Así, se espera que en los próximos días logren algún tipo de acuerdo para eventualmente unirse de cara al balotaje.

Participación democrática

Las votaciones se desarrollaron sin grandes contratiempos y también tuvieron importantes novedades, como el inédito voto de 39.000 chilenos que por primera vez pudieron ejercer su derecho a voto en el exterior.

Eso sí, la participación sería menos de lo esperado, con alrededor del 43%, un poco menos que lo registrado en la segunda vuelta de 2013, cuando salió electa Bachelet. En esa ocasión sufragó apenas el 43,3% del padrón electoral. Ayer, en cambio, 14,3 millones de chilenos estaban convocados para votar. Desde el año 2012 el voto es voluntario en Chile.

Presidenta destaca jornada

Al emitir su voto en un colegio privado en la comuna de La Reina en Santiago, la mandataria Bachelet destacó el carácter democrático de la jornada electoral.

“Espero que de los candidatos, si hay una segunda vuelta -cosa que yo creo que va a haber- podamos escuchar ideas compuestas, discusiones, propuestas sobre el modelo país que cada candidato o candidata representan”, dijo.

Al mismo tiempo, Piñera tuvo un pequeño contratiempo al sufragar, ya que se complicó al doblar su voto antes de ponerlo en la urna.

En caso de que Piñera logre imponerse en la segunda vuelta, habrá una reconfiguración del mapa político, ya que en ese caso se dará un cambio de signo político, de la centroizquierda la centroderecha.

Pero si Guillier se impone habrá continuidad. Eso sí, sea quien sea que llegue a La Moneda, no tendrá mayoría en el Congreso. Ayer los chilenos también votaban por diputados y senadores.

Durante su campaña, Piñera prometió un auge en el crecimiento económico y en la creación de empleo. Además, insistió en que pretende despedir del sector público a todos los “operadores políticos” y revertir algunos programas sociales de Bachelet.

En contraste con lo que ocurre con la centroizquierda, por primera vez en muchos años, la centroderecha chilena se cuadró con un solo candidato, dejando sus disputas internas a un lado.

Guillier, por su parte, sostuvo que él pretende continuar con las reformas estructurales de la Presidenta socialista y sus programas sociales. En cualquier caso, los analistas estiman que, más allá del signo político del sucesor de Bachelet, no habrá un cambio de modelo.

Por eso, muchos chilenos se abstuvieron de votar ayer, ya sea porque no esperan grandes transformaciones y también porque de alguna manera se sienten cómodos con la actual situación.

Luego de la votación, los chilenos se enfocarán en el balotaje y cualquiera que sea el resultado, la salida de Bachelet de La Moneda -en marzo próximo- significará que por primera vez en años no habrá una mujer en la Presidencia en América Latina. (I)

Presidencia

Por segundo mandato
→Sebastián Piñera ya ocupó la Presidencia de Chile durante el período 2010-2014. Es un acaudalado empresario, cuya fortuna está estimada en alrededor de $ 2.700 millones, de acuerdo con una publicación de la revista Forbes.

→14 millones de chilenos estaban aptos para votar en los comicios generales, según el padrón electoral.

Continuación de reformas
→El candidato Alejandro Guillier, durante su campaña, se comprometió continuar con las reformas que han quedado a medias, como la de la Constitución Política que data de la dictadura de Pinochet.

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En el mundo estaban aptos para votar 39 mil chilenos

Por primera vez, 39 mil chilenos estaban autorizados a ejercer su derecho a voto en el extranjero. Se conocieron casos de varios que viajaron horas para poder sufragar y la mayoría lo hizo por primera vez, desde Australia a Estados Unidos.

Según resultados preliminares del voto en el extranjero, Alejandro Guillier lideraba las preferencias del electorado, seguido por Beatriz Sánchez y en tercer lugar se ubicó Sebastián Piñera.

En Ecuador también se abrió el proceso en la embajada y consulados.

Por ejemplo, el Consulado  General de Chile en Guayaquil anunció a los residentes en esta ciudad que la mesa receptora de sufragios se ubicó en las instalaciones de la Universidad Casa Grande, al lado del centro comercial Albán Borja y que estaría abierto a recibir a los votantes desde las 09:00 hasta las 18:00.

Según la información de la legación diplomática, más de 400 chilenos residentes en Guayaquil y otras ciudades estaban habilitados para ejercer el voto. De esta manera se amplió la participación democrática.

Los chilenos residentes en 62 países del mundo podían acudir a las 110 mesas que el organismo electoral habilitó para el efecto, según lo planificado. (I)