Parlamento alemán aprueba presupuestos de 2012 con nuevo endeudamiento
El Bundestag (Parlamento federal) alemán aprobó este viernes, con los votos de la coalición de gobierno, los presupuestos generales para 2012, que prevén un nuevo endeudamiento de 26.100 millones de euros, 4.000 millones menos que en 2011.
El proyecto gubernamental de cuentas públicas para el próximo ejercicio obtuvo el respaldo de 307 diputados, del total de 560: los pertenecientes a la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel, y de sus socios, la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) y el Partido Liberal (FDP).
El ministro de Finanzas, el conservador Wolfgang Schäuble, subrayó que el presupuesto, que calificó de "responsable" y "sostenible", conjuga la urgencia de ahondar la "consolidación fiscal" en Alemania, una obligación constitucional en el país, con la necesidad de que el Estado sustente el crecimiento de la primera economía europea ante la amenaza de recesión en la eurozona.
El presupuesto para 2012 se eleva hasta los 306.200 millones de euros, apenas un 0,13 % superior al de 2010, de los que las políticas sociales son la primera partida por volumen, al precisar 126.460 millones de euros (41,3 % del total).
La segunda mayor partida es el pago de los intereses de la deuda soberana (equivalente a más del 83 % del Producto Interior Bruto), con 38.324 millones de euros, seguida de Defensa, con 31.872 millones de euros.
Por su parte, Sanidad recibirá 14.485 millones de euros; Educación e Investigación, 12.941 millones de euros; la Cancillería, 1.937 millones; Medio Ambiente, 1.591 millones, y Justicia, tan sólo 508 millones de euros.
Schäuble agregó que la Unión Europea debe caminar hacia la unión fiscal para anular una de las causas originales de la crisis, y sus Estados miembros deben mejorar su competitividad económica a la vez que reducen sus deudas.
La oposición -socialdemócratas, verdes y La Izquierda- criticó severamente el déficit previsto en las cuentas públicas, especialmente en el contexto de la crisis de la zona del euro, y los recortes que han sufrido ciertas partidas de política social.