La Corte Suprema de la provincia de Quebec, Canadá, admitió una demanda interpuesta contra la empresa desarrolladora del juego de video Fortnite, Epic Games.

La denuncia fue presentada en 2019 y alega que el juego desarrolló adicción en los niños. Los padres de los menores señalaron que sus hijos se comportaban de manera extraña, dejaron de comer y de dormir con tal de jugar Fornite.

"[Fortnite] tiene patrones de diseño que siempre fomentan la participación de los jugadores. Debe comprender que las cortezas prefrontales de los niños aún se están desarrollando... así que eso podría ser parte de la explicación de por qué este juego es particularmente dañino", manifestó Jean-Philippe Caron, el abogado de los demandantes, según recoge RT.

Además, un hecho que destacan medios internacionales señala que los niños gastaron demasiado dinero para comprar monedas del juego, conocida como V-Bucks. Según el medio mencionado, El juez de la Corte Suprema de Quebec, Sylvain Lussier, afirmó que tales compras no tienen "ningún valor tangible", lo que puede ser calificado como una violación del código civil de la provincia”.

Las autoridades tardaron tres años en admitir la demanda.